Esta residencia de Vizcaya está de enhorabuena por muchos motivos. No solo festeja el cumpleaños de Inés, de 105 años, y otros cuatro internos. También celebra que, a día de hoy, todavía no tiene contagios por coronaviurs.
El cartel de “zorionak” preside el salón de la residencia de Barrica en Vizcaya. Tarta, velas y aplausos para Inés que, en su 105 cumpleaños, puede ver desde el televisor cómo su familia le canta el ‘Cumpleaños feliz’ y la felicita a distancia. “Qué ganas tengo de velos”, comenta emocionada.
Cómo Inés, un total de cinco internos han cumplido años en este centro. Los cuidadores han montado para ellos una fantástica fiesta con mucha animación y música donde no podía faltar el consabido 'Resistiré'. “Hay que seguir dando, enchufando un poco de ánimo y alegría”, comentan con mucha razón dos de las trabajadoras del centro.
Pero en este centro se celebra la vida por un doble motivo. Después de descubrir auténticos dramas en no pocos geriátricos, es fantástico escuchar la noticia de que esta es una de las pocas residencias en las que no se ha registrado ni un solo contagio. Para prevenir que siga siendo así llevan más de mes y medio sin recibir visitas y sin salir de la residencia, por eso estas videollamadas las agradecen más que nada en el mundo.
Un caso similar es el de la familia de Iván, que parece vivir en un cumpleaños eterno desde que empezó la pandemia. La decoración del hogar familiar cambió desde el primer día de confinamiento. Justo coincidió con el cumpleaños de Mario, el mayor de los dos niños. Cumplió ocho años el pasado 13 de marzo y para celebrarlo Iván y su esposa Marta, ambos profesores, colgaron un cartel de "Feliz Cumpleaños" que, cinco semanas después, sigue presidiendo su salón. Los invitados de la fiesta, claro está son los cuatro miembros de esta familia tan cumpleañera.