Ana Céspedes, destacada investigadora española, responsable de operaciones de IAVI, Instituto de Investigación Biomédica con sede en Nueva York, donde permanece afincada, está volcada en el estudio de las vacunas contra la covid-19. Entrevistada por Pedro Piqueras a través de una conexión con Informativos Telecinco, ha lanzado un mensaje de tranquilidad y confianza en las vacunas, señalando que han demostrado su eficacia para evitar la mortalidad.
Preguntada sobre qué hace que vacunas como Pfizer y Moderna sean o parezcan más seguras que las de AstraZeneca o Janssen, ahora suspendida temporalmente, Céspedes ha apuntado que “hay que empezar a mirar los datos con perspectiva, porque ninguna de las cuatro vacunas aprobadas es 100% eficaz. Todo tiene un pequeño, –un pequeñísimo en este caso– riesgo. En el caso de AstraZeneca ahora tenemos muchos datos y sabemos que el riesgo de trombosis, de estos trombos raros, es ínfimo, muy pequeño si lo comparamos con el riesgo de trombos por tabaquismo, por anticonceptivos orales, o si lo comparamos con el propio riesgo de muerte por covid, que es 2.300 veces mayor. Son riesgos muy pequeños”, ha recalcado.
Ante la pregunta de si los trombos pudiesen tener relación con algún tipo de anticonceptivos, dadas algunas hipótesis surgidas, Céspedes explica que “podría ser posible” y “no lo podemos rechazar”, pero ha dejado claro que “necesitamos todavía más datos”.
“Actualmente se está estudiando”, ha apuntado, destacando que “lo importante es que ya sabemos qué síntomas demuestran que este tipo de eventos se pueden producir y, además, hay tratamientos”. “Una vez que se identifica que una persona tiene determinados síntomas, se puede tratar de este tipo de trombos, incluso”, ha asegurado.
Más allá, avalando la importancia de las vacunas, Céspedes ha recordado que “esto no es ningún experimento”: “Estamos en la vida real. Y en la vida real están muriendo 3.000 personas por cada millón de habitantes en España, y en otros países incluso más, y tenemos cuatro vacunas, que las cuatro han demostrado que previenen la muerte al 100%. Tenemos vacunas eficaces, seguras y de calidad. Nos lo está diciendo la EMA. No son políticos, son técnicos los reguladores que lo están diciendo, y llevan haciendo esto años. Tenemos que confiar en ellos”