La dieta del fósforo, vital para el crecimiento y la reparación de tejidos y células

  • El fósforo cumple una función básica en nuestro organismo, pero en exceso puede resultar perjudicial: descubre qué alimentos lo contienen

El fósforo es un mineral presente de forma natural en muchos alimentos, aunque también puede añadirse a productos procesados para enriquecerlos. Se trata de un componente básico en nuestra dieta, aunque debe ingerirse en su justa medida cuando existan problemas renales, ya que, en exceso, puede aumentar el riesgo de sufrir enfermedades cardíacas, así como debilidad ósea o dolor articular. ¿Cuáles son las funciones del fósforo en nuestro organismo? ¿Cuáles son los alimentos que contienen fósforo?

Funciones del fósforo en nuestro organismo: un elemento clave en la formación de nuestros huesos

La principal función del fósforo en nuestro organismo es la formación de huesos y dientes. Además, cumple un papel importante en la forma en que el cuerpo usa los carbohidratos y las grasas. El fósforo también es necesario para que el cuerpo produzca proteína para el crecimiento, así como para la conservación y reparación de células y tejidos, tl y como recuerdan desde MedlinePlus.

Al consumir alimentos con fósforo, éste ingresa en su mayor parte en la sangre, y los riñones se encargan de eliminar el excedente. Sin embargo, en caso de un mal funcionamiento de este órgano, es posible presentar un alto nivel de fósforo en sangre, lo que puede acarrear complicaciones para la salud.

Alimentos que contienen fósforo: aprende a introducirlo en tu dieta y a controlar su consumo

Tal y como recuerda Mayo Clinic, las necesidades de fósforo de cada persona dependen de su función renal. Así, cuando existe una enfermedad renal en etapa temprana o cuando la persona se está sometiendo a diálisis, es posible que se deba limitar la ingesta de fósforo. Ello se complica porque casi todos los alimentos contienen un poco de fósforo, aunque algunos son especialmente rico en este mineral. Por eso conviene saber qué alimentos contienen fósforo en mayor proporción, tanto si necesitamos aumentar su ingesta como si nuestro objetivo es limitarla.

Estos son los alimentos más ricos en fósforo:

  • Comidas rápidas y alimentos envasados y/o precocinados.
  • Leche, postres, yogur, leche de soja, cremas no lácteas y leches enriquecidas.
  • Quesos procesados, quesos para fundir y quesos para untar.
  • Queso crema sin grasa o crema agria sin grasa.
  • Helado o yogur helado.
  • Panes rápidos, galletas, pan de maíz, panecillos, panqueques o gofres rápidos.
  • Carnes frescas o congeladas que contengan sabor o líquidos añadidos para mantenerlas húmedas.
  • Carnes procesadas, como tocino, mortadela, croquetas de pollo, jamón y perritos calientes, y carne de vaca, pollo o mariscos con fósforo en sus ingredientes.
  • Chocolate o caramelo, incluidas las bebidas con chocolate y las barras de caramelo.
  • Refrescos de cola, aguas saborizadas, tés en botella, bebidas energéticas o para deportistas, muchas mezclas de bebidas en polvo, cerveza y vino.

En cuanto a los alimentos con menor contenido en fósforo (equivalentes o sustitutos de los anteriores), son los siguientes:

  • Comidas caseras o bocadillos hechos de ingredientes frescos.
  • Leche de almendra o arroz no enriquecida.
  • Una pequeña cantidad de queso Brie o queso suizo.
  • Queso crema o crema agria común o bajo en grasa.
  • Helados con base de agua, sorbetes o polos de frutas congeladas.
  • Panecillos frescos, pan, roscas o panecillos ingleses.
  • Carne de res magra, huevos, cordero, carne de caza o aves de corral totalmente naturales, mariscos u otros pescados sin fósforo en sus ingredientes.
  • Gominolas y caramelos duros como sustitutos del chocolate y demás dulces con fósforo (con moderación).
  • Refresco de lima limón, cerveza de jengibre, cerveza de raíz, agua corriente y algunas mezclas de bebidas (cualquiera sin fósforo en sus ingredientes), café recién preparado (hecho con grano) o té en infusión (hecho co bolsas de té).

Por último, más allá de estas recomendaciones generales, es importante revisar las etiquetas de los alimentos para analizar su contenido en fósforo en caso de deber limitarlo. Los fabricantes pueden añadir fósforo cuando procesan los alimentos para espesarlos, mejorar su sabor, evitar la decoloración o conservarlos.

Algunos ejemplos de aditivos alimentarios a base de fósforo incluyen los siguientes:

  • Fosfato de calcio
  • Fosfato disódico
  • Ácido fosfórico
  • Fosfato monopotásico
  • Pirofosfato ácido de sodio
  • Tripolifosfato de sodio