Tras más de dos meses cerradas, las termas de gallegas vuelven a abrir, eso sí, bajo fuertes medidas de seguridad. En las instalaciones de Outariz, en Orense, el aforo está limitado al 30% y hay que ir con cita previa. Además, hay un sistema de turnos de dos horas, y entre turno y turno, se efectúa una desinfección total del vestuario, taquillas y demás dependencias. Se exige a los clientes que se duchen en casa antes de venir. Una vez en el recinto, se tienen que poner la mascarilla, aunque en las piscinas no es obligatorio. Por otra parte, los bañistas deben seguir los circuitos previamente establecidos para disfrutar del baño. Todos los empleados se han sometido a la prueba del coronavirus y han dado negativo.
La piscina municipal de Sevilla reciben los primeros bañistas solo para practicar deporte y con protocolos de higiene igualmente estrictos. Por ejemplo, los usuarios tienen unos aros en los que dejan las cosas y luego se desinfectan.
Desde este lunes pueden abrir, sea cual sea la fase, las piscinas, de urbanizaciones o instalaciones privadas de toda España. Aunque solo para hacer deporte. La entrada será con cita previa y se debe garantizar la distancia de seguridad y el aforo máximo es del 30%.
En las piscinas se permitirá la práctica deportiva individual y cuando éstas estén divididas por calles de entrenamiento, se habilitará un sistema de acceso y control para que no haya aglomeraciones. En el Boletín Oficial del Estado se autoriza también la práctica de otros deportes en instalaciones cubiertas, con las mismas obligaciones de seguridad y aforo máximo y se reitera la necesidad de la desinfección de los materiales empleados por los deportistas y de las instalaciones.