Las autoridades de la región alemana de Baviera han decretado el confinamiento en ese "Land" del sur, el más extenso de Alemania y en el que viven 13 millones de personas, que se empezará a aplicar desde la próxima medianoche, en el marco de su lucha contra la pandemia de coronavirus.
El anuncio se ha echo público antes de la reunión que este domingo mantendrá la canciller alemana, Angela Merkel, con los jefes de Gobierno regionales para valorar el cumplimiento por parte de la población de las medidas adoptadas para frenar el coronavirus. En este encuentro está previsto tomar decisiones sobre esta base acerca de la aplicación de "instrumentos adicionales".
El portavoz del Gobierno, Steffen Seibert, dijo que la situación actual es dinámica y que ello implica la posibilidad de replantearse "en todo momento" las medidas adoptadas.
En Alemania hoy se informó de que el número de contagios con el coronavirus registrados ha aumentado en 24 horas en 2.958 hasta los 13.957 y los muertos ascienden a 31, once más que hace un día, según datos facilitados por el Instituto Robert Koch (RKI) de virología, el centro competente en epidemiología en este país.
El RKI calificó el aumento de "crecimiento exponencial" y precisó que la incidencia a nivel federal se sitúo así en 17 contagios por cada 100.000 habitantes, con claras diferencias regionales, algo habitual en toda epidemia, precisó.
En la reunión del domingo entre Merkel y los presidentes regionales se analizará la evolución de los últimos días, en la que será "decisiva" también la lectura que se pueda hacer de ello a partir de la vida pública que se detecte el sábado y a lo largo de todo el fin de semana.
El portavoz del Gobierno excluyó referirse a la expresión de "estado de alerta" o "confinamiento obligado".
Actualmente en Alemania rigen amplias restricciones en la vida pública, como el cierre de comercios no esenciales, y el Gobierno federal y los estados federados tienen previsto analizar durante el fin de semana si se ha logrado reducir la vida pública suficientemente como para ralentizar la propagación del virus y si los ciudadanos están cumpliendo las medidas de manera cohesionada.
Markus Söder, jefe del Gobierno de Baviera, donde el lunes pasado se declaró el estado de emergencia, decretaba mientras tanto el confinamiento obligado en todo el estado federado, de 13 millones de habitantes y una medida que de momento sólo se había ordenado para cuatro ciudades, vigente a partir de esta medianoche y por un período inicial de dos semanas.
En Baviera todavía se podrá no obstante salir para ir al lugar de trabajo, realizar compras indispensables, acudir al médico o a la farmacia y a tomar el aire, siempre y cuando no sea en grupo, y se ha anunciado que la policía controlará el cumplimiento de esta medida, que si se viola, implicará sanciones económicas.
También el estado federado de Sarre tiene previsto anunciar hoy el confinamiento obligado.