Los españoles de entre 55 y 75 años valoran su estado de salud con una puntuación media de 7,2 sobre diez, una cifra que varía "notablemente" en función de las enfermedades, capacidades físicas o mentales, hábitos médicos o factores como la alimentación, la actividad física, el sueño y la vida social, como informan en el vídeo Silvia Asiain, Óscar Arnaiz y Javier Marañón.

Así lo refleja el informe 'Séniors y Salud en España', presentado por el Centro de Investigación Ageingnomics de Fundación MAPFRE, en colaboración con Fundación IDIS y Lukkap.

Estos datos nacen de un total de 2.596 entrevistas y esa cifra tiene que ver con que la mayoría percibe que cuida de su salud física, habiendo un 53% que camina a diario y un 13% que hace ejercicio al menos cuatro veces a la semana y que lleva una alimentación saludable.

Mientras un 80% asegura que consume fruta y verdura de forma regular, hasta un 86% afirma tomar comida casera. En este sentido, un 64% evita los alimentos procesados y un 59% evita tanto los dulces como las bebidas azucaradas. El consumo de alcohol, por su parte, se reduce a una vez cada 15 días o menos para el 61%.

Las cifras cambian cuando por lo que se pregunta es por la calidad del sueño. En este aspecto, el informe destaca que un 43% no lograr dormir entre siete y ocho horas, y un 67% reconoce que se despierta con la sensación de no haber descansado durante la mayor parte de la semana.

Como cabe esperar a este respecto, cuanto más les cuesta dormir, peor es su percepción de su salud.

Por otro lado, los encuestados han asegurado que se sienten "vitales y acompañados", valorando con un 7,6 de media su ilusión por el futuro, considerando una gran mayoría que no necesita ayuda en su vida diaria. Su sensación de vitalidad y su sentimiento de no estar solo ha recibido un 8,1 de calificación media sobre diez.

Los datos chocan, no obstante, con la puntuación del cuidado de su bienestar emocional, que consideran de 4,4 sobre diez, algo que el coordinador del informe, Alberto Córdoba, ha achacado a que, si bien hay un amplio conocimiento sobre lo que es positivo para los hábitos físicos, no hay tanta conciencia sobre lo que es "cuidar la mente".

"Sí es importante destacar que al preguntarles por su percepción de bienestar emocional, aquellos que planificaban la actividad física de mayor intensidad, como por ejemplo nadar, montar en bicicleta o correr (solo un 22%  realiza estas dos veces a la semana) al menos aunque fuera cada 15 días, tienen una mejor percepción del cuidado de su bienestar emocional (...) Todos los grupos que realizan alguna actividad física, excepto el de andar exclusivamente, refieren un cuidado de bienestar emocional superior a la media", ha explicado la doctora Eva Arranz, de Fundación MAPFRE.

Por otro lado, el estudio también apunta que una mayor frecuencia de los planes sociales se relaciona con una mejora del bienestar emocional, y hasta un 41% ha reconocido organizar planes semanalmente, tales como compartir comidas y viajes con amigos, o realizar actividades culturales, al aire libre y en comunidad.

De hecho, la percepción de la salud de aquellos que salen a diario es de 7,6, mientras que la de los que tienen planes menos de una vez al mes es de 6,7 puntos, lo que también refleja, señala el estudio, que vivir solo o acompañado no altera la sensación de los encuestados sobre su estado de salud y grado de vitalidad, aunque sí repercute en su nivel de ilusión por el futuro.

Por otra parte, los encuestados han resaltado que el cuidar de sus nietos es la actividad que les hace sentirse más realizados (puntuación de 8,3), seguida de cuidar de su pareja (8,1), de otra persona (7,6) y de sus padres (7,5).

El documento también muestra que un 57% de los entrevistados revisa su salud al menos una vez al año por prevención, mientras que un 52% acude dos veces por enfermedad, siendo las especialidades a las que más acuden la Ginecología (74% del total de mujeres), la Urología (48% del total de hombres) y Digestivo (41%).

En este sentido el informe destaca que a menor número de revisiones, mayor percepción de su salud presentan, aunque esta sensación también depende del número de patologías que se padezcan o de la cantidad de medicamentos que se consuman diariamente; las enfermedades que más impactan en este pensamiento son las pulmonares, el ictus, el infarto o el cáncer.

El 75%  de estas personas sufre una patología crónica, siendo las más frecuentes la hipertensión (35%), el colesterol alto (30%) y la artritis o artrosis (26%), mientras que un 15 por ciento padece una enfermedad grave.

Atendiendo a los resultados de la encuesta por comunidades autónomas, en lo que se refiere a la valoración del estado de salud, encabezan la clasificación Navarra (7,5), La Rioja (7,4) y Madrid (7,4), mientras que Asturias (6,9) e Islas Canarias (6,8) se encuentran por debajo de la media nacional.

Mientras tanto, las comunidades con un mayor grado de ilusión por el futuro son Cantabria (8,2), La Rioja (8,1) y Madrid (7,9). La comunidad con menos puntuación en esta categoría es Islas Baleares, con un 6,9.

Respecto a la sensación de estar valorado, los mayores de La Rioja (8,3), de Navarra (8) y de Castilla La Mancha (7,8) encabezan esta lista, que cierran a la cola Islas Canarias (7) e Islas Baleares (6,9).

Ante los resultados de este informe, la directora general de Fundación IDIS, Marta Villanueva, ha resaltado que sirve para intentar "acoger" a este colectivo para hacerles "sentir parte imprescindible" de la sociedad actual y del futuro.

Villanueva también ha recordado que ya se está comenzando a interiorizar este tipo de hábitos saludables a nivel físico, si bien hay que seguir recordando cuáles son los comportamientos que conviene implantar para ganar más calidad de vida.

Estos hábitos pasan por una correcta alimentación, rica en frutas y verduras (al menos cinco porciones al día), con un bajo consumo de alimentos ricos en azúcares, grasas y sal, como, por ejemplo, los ultraprocesados; por realizar actividad física regular, con hábitos sencillos como caminar, nadar o subir escaleras y con ejercicios de fuerza y equilibrio; gestionar el bienestar emocional a través de una actitud positiva, ser consciente de las prioridades de la vida, intentar tomarse las cosas con mayor calma, participar en actividades con otras personas y pasar tiempo al aire libre; así como cuidar el tiempo de descanso, con al menos siete horas al día de sueño, reducir al máximo el consumo de alcohol y abandonar el tabaco.

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