Towana Looney, es una mujer de Alabama, Estados Unidos, que ha recibido el riñón de un cerdo modificado genéticamente, gracias al que podrá dejar de ir a las sesiones de diálisis. Han pasado ya dos meses desde que le hicieron esta operación que aún sigue siendo experimental, pero que ha conseguido salvar la vida de algunas personas.
Meses antes donó su riñón a su madre, lo que no sabría es que, tiempo después, ella sería la que lo necesitaría tras sufrir un fallo renal por complicaciones del embarazo. Para pacientes como Towana, los xenotrasplantes, es decir, los trasplantes de órganos de animales a humanos son la última oportunidad que tienen de conseguir un órgano que les permita seguir viviendo.
Al ser un procedimiento experimental son pocas los personas que cumplen el requisito de que su enfermedad no tenga cura. La autoridad competente de Estados Unidos solo lo autoriza como uso compasivo. Aun así, son varios los casos en los que se ha realizado con éxito este tipo de trasplantes, de riñón y de corazón.
La novedad en la operación de Towana es el número de modificaciones genéticas que tenía el órgano a trasplantar. Para evitar que el cuerpo rechace el órgano del cerdo este tiene que estar modificado genéticamente, ya sea para prevenir un rechazo inmediato o para evitar que una vez trasplantado, el órgano siga creciendo. Desafortunadamente, la supervivencia tras la operación suele ser baja, pero con cada intervención se está un paso más cerca de conseguir que pacientes como Towana tengan una nueva vida.
Suscríbete a las newsletters de Informativos Telecinco y te contamos las noticias en tu mail.
Síguenos en nuestro canal de WhatsApp y conoce toda la actualidad al momento.