Son la causa más frecuente de las muertes súbitas en menores de 35 años. Se llaman cardiopatías familiares, porque son congénitas y hereditarias. El objetivo es detectar la patología, antes de que el paciente enferme para poder prevenir en él y en sus familiares posibles muertes súbitas.
En el Hospital Gregorio Marañón han valorado a entre 4.500 y 5.000 familias y han establecido una colaboración con el Instituto Anatómico Forense para poder detectar casos de muerte súbita sospechosos de tener detrás una cardiopatía familiar.
La coordinadora del programa CESUR del hospital, María Ángeles Espinosa, explica que es muy importante porque se ayuda a la familia a entender lo que ha sucedido, que es además un hecho muy dramático porque suele tratarse de gente joven y deportista, y además se previenen más sucesos similares en el resto de los miembros de la familia.
Una patología congénita que afecta a uno de cada mil niños. Pero se puede incluso hacer un análisis pregestacional, de manera que se elijan previamente los embriones que no tienen la mutación.
Un trabajo interdisciplinar que cuenta con cardiólogos, enfermeras, pediatras, especialistas en cardiología no invasiva, arritmias, así como genética y genómica.
Suscríbete a las newsletters de Informativos Telecinco y te contamos las noticias en tu mail.
Síguenos en nuestro canal de WhatsApp y conoce toda la actualidad al momento.