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El presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, se recupera favorablemente de una operación a la que ha sido sometido en la tarde del miércoles a causa de un desprendimiento de retina.
¿Cuándo se produce un desprendimiento de retina? La retina es una lámina sensible a la luz situada en la parte posterior del ojo. El desprendimiento surge cuando esta se separa de la parte posterior del ojo, acumulándose líquido en el espacio que queda entre ambas. Lo que conduce a una pérdida, en ocasiones irreversible, de visión.
"El desprendimiento de retina es un problema grave. Un oftalmólogo debe evaluarlo de inmediato o usted puede perder la visión en ese ojo", avisan desde la Academia Americana de Oftalmología a través de su página web.
Afecta aproximadamente a una de cada 10.000 personas al año. Es un problema ocular grave que puede darse a cualquier edad, aunque habitualmente aparece en la edad adulta.
Existen una serie de factores de riesgo como:
Los síntomas del desprendimiento de retina son muy variados y pueden coexistir en el mismo paciente.
Los primeros de la enfermedad suelen ser la presencia de marchas en la visión, las conocidas como "moscas volantes". También pueden darse destellos luminosos, visión de imágenes distorsionadas o acuosa.
La mayoría de las veces, los cuerpos flotantes negros o manchitas y destellos luminosos no indican ningún problema grave y son relativamente frecuentes en personas de edad mediana y avanzada. Sin embargo, es necesario que el paciente acuda a urgencias para que el oftalmólogo realice una exploración ocular con el objetivo de comprobar si existen desgarros en la retina.
Si el desprendimiento no se trata, se pierde la visión de manera irrecuperable, puesto que se produce progresivamente atrofia de la retina e inflamación ocular crónica.
Una vez desprendida la retina, el tratamiento es siempre quirúrgico. Los objetivos del tratamiento son cerrar mediante láser o crioterapia el desgarro o rotura que ha derivado en el desprendimiento de retina y colocar la retina en su sitio. La intervención se realiza de forma ambulatoria, bajo anestesia local o sedación.
Los casos más complicados de desprendimiento de retina se tratan con una técnica quirúrgica denominada vitrectomía que consiste en extraer el humor vítreo de la cavidad ocular y sustituirlo por otro material.
Durante la recuperación el paciente deberá mantenerse boca abajo cuando su cirujano haya colocado una burbuja de gas intraocular durante la cirugía, hasta que esta desaparezca.
Debe permanecer boca abajo siempre que pueda, aunque esté de pie, sentado, comiendo, caminando o durmiendo. Además de abstenerse de volar en avión, bucear, subir a montañas o a lugares de mucha altitud hasta que la burbuja de gas desaparezca.
En la mayoría de casos se puede recuperar la visión tras una operación de retina. No obstante, cada operación conlleva sus riesgos.
Existen varios factores que pueden ser de vital importancia, como son la detección precoz. Por desgracia si el desprendimiento de retina no se trata o no se trata a tiempo puede provocar una pérdida de visión permanente.
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