Varios estudios han demostrado que la Covid-19 afecta a las mujeres embarazadas de manera especialmente peligrosa, aumentando el riesgo de complicaciones relacionadas con el embarazo, como parto prematuro o muerte fetal. Además, ahora se ha conocido un nuevo factor determinante: las mujeres embarazadas que contraigan Covid desarrollarán Covid persistente.
Se descubrió que el 9,3% de las personas que contrajeron Covid durante el embarazo experimentaron posteriormente síntomas a largo plazo. Algunos de los síntomas más comunes de COVID a largo plazo que experimentaron las participantes fueron fatiga, problemas gastrointestinales y sensación de agotamiento por las actividades rutinarias.
Varios factores se asociaron con un mayor riesgo de Covid persistente. Las personas con ansiedad o depresión antes de la infección, así como las personas con obesidad, tenían más probabilidades de experimentar síntomas duraderos. Las dificultades económicas declaradas por los propios pacientes también se asociaron con tasas más altas de COVID prolongado, aunque el estudio no pudo determinar si las dificultades económicas eran una causa o una consecuencia de los síntomas prolongados.
Como conclusión, se estableció que las mujeres embarazadas tienen un mayor riesgo de sufrir síntomas graves durante la infección, debido a que sus sistemas inmunológicos tienden a reaccionar con menos fuerza. Sin embargo, también suelen tener un menor riesgo al sufrir daños orgánicos a largo plazo, porque, por lo general, son más jóvenes y mas sanas.
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