Investigadores del Instituto de Investigación Sanitaria Marqués de Valdecilla (IDIVAL) de Cantabria intentan descifrar, desde hace una década, el papel que juegan los factores ambientales en el desarrollo de la esclerosis lateral amiotrófica (ELA), porque en esa región la incidencia de la enfermedad ha aumentado "un 70 % en los últimos 40 años".
La ELA es una enfermedad degenerativa que afecta en la actualidad a unas 4.000 personas en España y se caracteriza por una pérdida de masa muscular progresiva que termina conduciendo al fallecimiento de los pacientes, ya que carece de tratamiento curativo. El día 21 de junio se celebra el Día Mundial de la Esclerosis Lateral Amiotrófica, una fecha clave para poner en relieve la investigación que se lleva cabo para desarrollar nuevas soluciones y avanzar en su comprensión.
Cambios en los hábitos de vida, el estado nutricional, la actividad física o la exposición a agentes tóxicos podrían influir en esas cifras, según explica en un comunicado el neurólogo en el Hospital Sierrallana y responsable de la investigación en ELA del IDIVAL, Javier Riancho. En este sentido, los investigadores están estudiando la presencia de contaminantes dentro del interior de las viviendas de los pacientes.
Se trata de una cuestión "altamente novedosa y muy pertinente ya que el hogar es el lugar donde más tiempo pasamos como individuos", apunta la profesora Ana Santurtún, investigadora del grupo de Enfermedades esqueléticas, metabólicas y ambientales del IDIVAL y del Área de Medicina Legal de la Universidad de Cantabria.
Así, el equipo investigador analiza cómo los distintos factores ambientales inducen cambios a nivel de la expresión de los genes y la degeneración de las motoneuronas, que se encargan en transmitir la información para llevar a cabo movimientos voluntarios.
Un análisis que, en opinión de Santurtún, resulta "crucial" para entender los mecanismos por los que se produce la enfermedad, como paso previo a la implementación de posibles tratamientos.
Ambos investigadores subrayan la importancia de la colaboración multicéntrica a la hora de abordar el estudio de enfermedades "menos frecuentes" y, en este caso, están en contactos con otros neurólogos de Cantabria y expertos de las universidades de Oxford y Coímbra.
En los últimos años, estos estudios han sido financiadas por proyectos competitivos, entre los que destacan el programa TRANS-VAL, para la transición de proyectos del Plan Nacional, y la reciente concesión de Investigación en Salud del Instituto de Salud Carlos III, que permitirá continuar trabajando en esta línea durante los próximos años.
Suscríbete a las newsletters de Informativos Telecinco y te contamos las noticias en tu mail
Síguenos en nuestro canal de WhatsApp y conoce toda la actualidad al momento.