La identificación de una nueva sustancia, denominada CMC-Clefedrona, ha puesto de manifiesto la capacidad de los traficantes de drogas para crear compuestos cada vez más peligrosos y menos predecibles. ¿Qué sabemos sobre esta droga y cómo difiere de otras sustancias conocidas?
4-CMC, conocida como clefedrona, es una droga psicoestimulante similar al éxtasis. Pertenece a la familia de las catinonas sintéticas, compuestos más peligrosos y dañinos que muchos otros psicoestimulantes.
Se ha conocido su existencia recientemente en el mercado de las nuevas sustancias psicoactivas en Europa. La primera vez que se tuvo conocimiento fue en 2014 y seis años más tarde se fiscalizó a nivel internacional. Ahora, ha aparecido en el festival de música Primavera Sound, que se ha celebrado en Barcelona desde el 30 de mayo al 1 de junio en el Parc del Fòrum.
La pastilla, que se ha estado vendido como MDMA, es rosa, y de forma cuadrada. Se puede identificar también por el logo estampado de una marca de ropa, Under Armour.
Se puede tomar por vía oral y su efecto tarda de 20 minutos a una hora en aparecer, pudiendo dura hasta un máximo de cuatro. Puede provocar euforia, incremento de energía, sociabilidad y sexualidad a alucinaciones visuales y auditivas o efectos empatógenos.
En el caso de esnifarla por la nariz el efecto es más rápido y en cuestión de dos minutos comienza a sentirse los efectos estimulantes recordando a los de la anfetamina, según destacan desde Energy Control, el programa que ha intervenido en su detección.
La falta de información sobre la composición y los efectos de CMC-Clefedrona podría plantear una amenaza para la salud pública. ¿Cuáles son los riesgos asociados con el consumo de esta droga?
Los efectos adversos que se conocen son el insomnio, la ansiedad, el aumento del pulso cardíaco, la presión sanguínea elevada o la vasoconstricción periférica (estrechamiento de los vasos sanguíneos). Además bruxismo, dilatación de pupilas, sudor y temperatura corporal elevada, entre otros.
Se han reportado diversos incidentes de intoxicación, algunos de ellos mortales, relacionados con el uso de 4-CMC. En la mayoría de estos casos, se observó una combinación de 4-CMC con otras sustancias.
Actualmente, no se disponen de datos sobre los posibles riesgos a largo plazo asociados con el consumo de 4-CMC, debido a su reciente introducción en el mercado. Energy Control sugiere que es probable que estos riesgos sean comparables a los de otras drogas de la familia de las catinonas, así como a los efectos adversos asociados con la anfetamina o la MDMA.
Este incidente subraya la necesidad de una mayor educación sobre drogas y una mayor conciencia de los riesgos asociados con el consumo de sustancias desconocidas.
"¡Analiza antes de consumir! El mercado está cambiando y disponemos de poca información sobre los riesgos de la 4-CMC", apuntan desde Energy Control.
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