Los cigarrillos electrónicos se encuentran entre los más jóvenes desde hace un tiempo, pero ¿Cómo llegan hasta ellos? Una investigación de Nicotine and Tobacco Research muestra que las redes sociales no solo son una vía de visualización a los adolescentes, sino también de venta. Plataformas como TikTok e Instagram son un campo abierto, ya que no cuentan con las políticas reguladoras de los cigarrillos electrónicos.
A través de videos en las redes sociales ciertos perfiles muestran sus productos, y venden y distribuyen ilegalmente cigarrillos electrónicos, paquetes de nicotina y cannabis a escala internacional a un público joven. Para esta investigación se han analizado 475 videos entre junio de 2022 y agosto de 2023.
El estudio indica que la publicidad y la venta de vapers a menores a través de la red social Tiktok se camufla y llega a los adolescentes bajo los hashtags #puffbundles o #vapebundles . En los paquetes, como el que refleja el video, se incluyen otros objetos como brillos de labios o caramelos para disimular la verdadera estrella: el cigarrillo electrónico. Sus envoltorios también consiguen eludir estos productos y así poder llegar a los menores de edad sin problema.
"Los usuarios de TikTok de todo el mundo infringen las leyes locales, estatales y federales al vender cigarrillos electrónicos ocultos dentro de otros productos o en paquetes que evitan su detección", según una de las conclusiones del estudio. A lo que añaden: "Las agencias reguladoras deberían ampliar las estrategias de aplicación de la ley para incluir plataformas de redes sociales". La investigación hace hincapié en que en estas publicaciones se utilizan palabras clave como #falso para que los administradores o algoritmos de TikTok no puedan detectar estas cuentas.
Según un informe de la Organización Mundial de la Salud, más del 30% de adolescentes de 15 años ha usado vapeadores a lo largo de su vida. En el caso de España, la Sociedad Española de Epidemiología (SEE) alerta sobre el consumo de este dispositivo entre los adolescentes españoles de 14 a 18 años.
En 2023, el 26% de los jóvenes declaró haberlos utilizado en los últimos 30 días, frente a un 21% que afirmó haber fumado tabaco convencional. Mientras que el consumo de estos continuó disminuyendo entre 2014 y 2023, el uso de vapers alguna vez en la vida se multiplicó por tres (17% frente a 54,6%) entre los adolescentes.
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