Este martes será el último día en el que se comercialice la vacuna de AstraZeneca contra el Covid-19. El propio laboratorio solicitó hace un mes a la Comisión Europea su retirada por “excedente de vacunas disponibles”, según ha informado la propia multinacional británica-sueca: "Estamos increíblemente orgullosos del papel que desempeñó Vaxzevria para poner fin a la pandemia mundial. Según estimaciones independientes, solo en el primer año de uso se salvaron más de 6,5 millones de vidas y se suministraron más de 3.000 millones de dosis en todo el mundo".
Esta noticia se une a la anunciada hace unos días. Por primera vez, la empresa ha reconocido en un documento legal presentado ante el Tribunal Superior de Reino Unido que su vacuna contra el Covid-19 puede provocar efectos secundarios como trombosis en "casos muy raros”. La compañía ha hecho hincapié en que este tipo de efectos son muy poco frecuentes, algo que avaló en su momento la propia Agencia Europea de Medicamentos (EMA) cuando subrayó que el beneficio-riesgo frente al Covid-19 no hacía desaconsejar su uso.
De momento, a pesar de que parece tener una unión la retirada de la vacuna con la denuncia de los efectos secundarios, AstraZeneca no lo ha vinculado. En España se administró fundamentalmente a personas entre 60 y 69 años hasta julio de 2021, momento en el que la Unión Europea rompió el contrato con el laboratorio y anunció que no volvería a renovarlo.
Los efectos secundarios de las vacunas contra el Covid-19 son muy poco comunes. En algunos casos se han dado efectos leves tras su aplicación que suelen desaparecer a los días, como puede ser la hinchazón del brazo o fiebre. Además, algunas personas han sufrido un shock anafiláctico, aproximadamente 5 por cada millón de dosis administradas. Todo esto, con independencia de la compañía que hubiese detrás.
Las afecciones graves se han producido en muy pocos casos. Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) han anunciado algunas desde que la pandemia irrumpió en nuestra vida. Por ejemplo, el Síndrome de Guillain-Barré (SGB), un trastorno poco frecuente en el que el sistema inmunitario daña las neuronas y causa debilidad muscular, incluso parálisis. Puede aparecer de manera muy puntual, principalmente entre personas de 50 años de edad o más, tras la administración de Pfizer-BioNTech o Moderna.
También varios casos "muy raros" de miocarditis y pericarditis han tenido lugar en personas a las que se le ha administrado estas dos vacunas. Se trata de inflamaciones en el corazón o en la membrana que lo rodea y vienen acompañadas de un fuerte dolor. La mayoría de los pacientes que sufrieron estas reacciones respondieron bien a la medicación y al reposo.
Estas reacciones se han registrado en pocos casos, y son afecciones menos graves que las trombosis vinculadas y reconocidas por AstraZeneca.
Suscríbete a las newsletters de Informativos Telecinco y te contamos las noticias en tu mail
Síguenos en nuestro canal de WhatsApp y conoce toda la actualidad al momento.