¿Cuáles son los mejores pescados para cuidar el corazón?

El cuidado del corazón es esencial para conseguir mantener una vida larga y saludable. Una de las piezas del puzle para hacerlo de la forma más efectiva es a través de la alimentación. Lo que comamos a lo largo de nuestra vida afecta a nuestro cuerpo, órganos y tejidos de manera indefectible, y el pescado podría destacarse como uno de nuestros grandes aliados en este objetivo de optimizar nuestra salud cardiaca. 

Con su abundante cantidad de ácidos grasos omega-3 y otros nutrientes esenciales, existen ciertos tipos de pescado que son una elección aún más sabia para tratar de mantener nuestro corazón en óptimas condiciones. El primer paso para incorporarlos a nuestra dieta de la manera más deliciosa posible es conocerlos, y por eso allá van los mejores pescados para cuidar el corazón.

  • Salmón: Este es uno de los pescados más aclamados por su alto contenido de ácidos grasos omega-3, hablamos específicamente del ácido eicosapentaenoico (EPA) y el ácido docosahexaenoico (DHA). Estos ácidos grasos ayudan a reducir la inflamación y a mantener los niveles de colesterol bajo control. El salmón también es rico en proteínas de alta calidad y es una fuente de selenio, vitamina D y B12. Puede disfrutarse a la parrilla, horneado o, incluso, en sushi.
  • Caballa: La caballa es otro pescado que merece ser incluido en nuestra dieta si lo que queremos es cuidar el corazón. Al igual que el salmón, es rico en EPA y DHA, lo que lo convierte en una excelente opción para reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares. Además, la caballa proporciona vitamina B12 y selenio. Se puede asar, ahumar o cocinar en una amplia variedad de recetas.
  • Arenque: Estamos ante otra fuente abundante de omega-3, que también es rica en proteínas. Este pescado azul se consume ampliamente en muchas culturas debido a su sabor distintivo, aunque puede no ser del gusto de muchos por eso mismo. Los arenques enlatados en aceite de oliva son una opción popular y práctica. Se pueden añadir a ensaladas, sándwiches o servirlos directamente sobre galletas saladas.
  • Trucha: Al contrario que el arenque, esta es una excelente opción para aquellos que prefieren sabores más suaves. También es rica en ácidos grasos omega-3, proteínas y vitamina B12. Se puede asar, hornear o cocinar a la parrilla con hierbas y limón para realzar aún más su sabor.
  • Anchoas: Las anchoas, que son unos pequeños pescados enlatados y en aceite, son una adición sabrosa y versátil a muchas comidas. Son un alimento rico en ácidos grasos omega-3 y calcio. Se pueden poner en pizzas, ensaladas, pasta o bocadillos para dar un toque de sabor salado y marino a nuestras recetas.
  • Sardinas: Este popular pescado es una opción asequible y saludable para cuidar nuestro corazón. Las sardinas son ricas en EPA y DHA, además de calcio y vitamina D. Podemos encontrar sardinas enlatadas en aceite o tomate, que son ideales para tus sándwiches o ensaladas.
  • Atún: Se trata de una fuente de ácidos grasos omega-3 y proteínas magras. El atún enlatado es conveniente y versátil, y se puede usar en ensaladas, sándwiches o como relleno para sushi. En caso de poder elegir, es mejor optar por el atún en agua o aceite de oliva para que nuestra elección sea más saludable.
  • Pescado Blanco: Aunque los pescados azules son conocidos por su alto contenido de omega-3, los pescados blancos como la merluza y el bacalao también son excelentes opciones. Son bajos en grasa y proporcionan proteínas magras, vitamina B12 y minerales. Podemos cocinarlos al horno o a la parrilla con hierbas y aceite de oliva para resaltar su distintivo sabor.

Tu corazón se pone contento si agregas pescado a tu dieta

Los pescados mencionados más arriba son ejemplos perfectos del tipo de alimentos que benefician nuestra salud cardiovascular. Incorporarlos en nuestra dieta regularmente puede ayudarnos a mantener los niveles de colesterol bajo control, a reducir la inflamación y además a proteger tu corazón. Combinando estos sabrosos pescados en sus más diversas preparaciones culinarias podremos disfrutar de sus beneficios mientras deleitamos nuestro paladar. Nuestro corazón nos lo agradecerá con el paso de los años.