La Unión Europea, a través del Sistema de Alerta Rápida para Alimentos y Piensos (RASFF), ha alertado a España sobre unas aceitunas procedentes de Marruecos. El motivo es que contienen altos niveles de clorpirifós, un pesticida moderadamente tóxico y no autorizado por las autoridades comunitarias. El pasado mes de julio ocurrió lo mismo pero con otro pesticida y en sandías.
Aunque la voz de alarma se ha dado esta semana, el producto entró en nuestro país el pasado 18 de agosto, día en el que se realizó un control en frontera, detalla el RASFF. Según la notificación colgada por la propia Comisión Europea en la web de alertas, se trata de unas "aceitunas barbacoa".
Los resultados de la analítica mostraron la presencia del insecticida en una proporción de 0,067 mg/kg-ppm, cuando su Límite Máximo de Residuos (LMR) está fijado en 0,01 mg/kg. De este modo, han sido calificadas como aceitunas de riesgo grave por la UE.
Según apuntan varios medios, el consumo de dicha sustancia puede desembocar en un elevado riesgo de afectación al desarrollo neurológico en niños, así como dolores de cabeza, náuseas o diarrea cuando se ingiere en bajas cantidades. Una dosis alta de clorpirifós podría acarrear una parálisis respiratoria, llegando incluso a causar la muerte.