La Agencia de Salud Pública de Barcelona ha declarado un brote de viruela del mono (Mpox) en la ciudad, a raíz de la detección de seis casos en el último mes, sin ninguna relación epidemiológica entre ellos.

Dos de los casos se detectaron en julio y los otros cuatro en agosto y parece que las personas afectadas se habrían contagiado fuera de Cataluña, según ha avanzado 'El Periódico'.

En declaraciones a 'RAC-1', el subdirector general de Vigilancia y Respuesta de Emergencias de Salud Pública de la Generalitat, Jacobo Mendioroz, ha asegurado este viernes que son casos puntuales y ha estimado que no llegará a haber una propagación como la del pasado año, cuando se detectaron más de 2.000 casos de viruela del mono en Cataluña.

La viruela del mono es una enfermedad producida por un virus de la familia de la viruela que desde el 23 de julio de 2022 hasta el pasado 11 de mayo de 2023 ha constituido una Emergencia de Salud Pública de Importancia Internacional por el brote ocurrido a nivel mundial durante esos meses.

Se transmite sobre todo en las relaciones sexuales y su principal síntoma son lesiones cutáneas. La prevención mediante la vacunación es una de las medidas más importantes para evitar la enfermedad, reducir sus síntomas y limitar la transmisión. 

Los casos no están relacionados entre sí, pero al coincidir en un mismo espacio y tiempo, la ASPB ha optado por declarar el brote. Fuentes del Ayuntamiento de Barcelona han explicado a Europa Press que este es un proceso habitual para que los centros sanitarios puedan detectar mejor los posibles casos y puedan dar una respuesta "más precisa".

Desde el inicio de la vacunación en 2022 se han puesto 20.000 vacunas contra la viruela del mono en Catalunya.

También conocida como mpox, se trata de una enfermedad de declaración obligatoria individualizada y de declaración urgente a la ASPB si es en Barcelona y, una vez confirmados los casos, esta lo comunica al Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias (CCAES) del Ministerio de Sanidad.

Los síntomas clásicos de esta enfermedad incluyen fiebre, dolor de cabeza y muscular, ganglios inflamados, cansancio y lesiones cutáneas, que pueden ser planas o ligeramente elevadas llenas de líquido, que tienden a concentrarse en la cara y las palma de las manos y los pies, según la Organización Mundial de la Salud.

Sin embargo, hay otros síntomas más particulares de esta enfermedad que pueden ayudar a su diagnóstico, como son las lesiones genitales únicas y llagas en la boca o el ano, que son similares a los de las infecciones de transmisión sexual y pueden llevar fácilmente a un diagnóstico erróneo.

Un estudio que publica 'The New England Journal of Medicine' (NEJM) señala que “muchos de los individuos infectados”, presentaban estos nuevos síntomas que no están reconocidos en las definiciones médicas actuales de la viruela del mono. "Una de cada diez personas tenía una única lesión cutánea en la zona genital y el 15 % presentaba dolor anal y/o rectal”, explicó uno de los autores John Thornhill, de la Universidad Queen Mary de Londres.

Los diferentes síntomas ponen de manifiesto que las infecciones podrían pasar desapercibidas o confundirse fácilmente con otras comunes de transmisión sexual, como la sífilis o el herpes. Hay que destacar que la mayoría de las infecciones se produjeron a través de la actividad sexual (95% de los casos).

Respecto a las manifestaciones clínicas casi todos los pacientes (95%) presentaban una erupción (el 64% tenía 10 lesiones), el 73% tenía lesiones anogenitales y el 41% tenía lesiones en las mucosas. A la erupción se asoció fiebre (62%), letargo (41%) mialgia (31%) y cefalea (27%); la linfadenopatía también era frecuente (en el 56%).