Las olas de calor cada vez se repiten más y lo hacen con temperaturas más extremas. Para las personas vulnerables, esto puede serios problemas de salud, que van desde mareos y debilidad o insomnio, hasta desmayos y alteración de la presión arterial. Así afectan estos episodios a nuestra salud física y mental.
Casi 62.000 personas murieron por calor en Europa el verano pasado. Solo en España, el mes de julio de 2022 dejó más de 2.000 víctimas mortales atribuibles a las altas temperaturas, la mayoría personas mayores de 65 años.
Esta semana, está previsto que una masa de aire africano dispare el termómetro muy por encima de las temperaturas habituales para esta fecha, que de por sí se encuentra dentro de la canícula, la época del año históricamente más calurosa en España.
Está previsto que algunas ciudades de la meseta norte alcancen por primera vez los 40 ºC, como Burgos o Soria, y en partes de Andalucía o de Murcia quizá lleguemos a 44 o 45 ºC, un valor extremo que el cuerpo humano no puede soportar.
La exposición a estas temperaturas durante demasiado tiempo puede hacer estragos en la salud.
El calor produce un aumento del flujo de la sangre a la piel mediante la dilatación de los vasos sanguíneos y el aumento de latidos del corazón, así como un aumento de la respiración, del consumo de energía por el cuerpo y de la sudoración.
En personas mayores o enfermos crónicos, o que toman medicación, estos mecanismos del cuerpo para regular su temperatura interna y enfriarse se encuentran debilitados. Esto es debido a la por la pérdida de grasa subcutánea, así como a una disminución de la sudoración y de los receptores de cambios de la presión arterial, a la elasticidad de los vasos sanguíneos; produciendo en consecuencia una desadaptación a las temperaturas externas.
También son población de riesgo las personas cuya profesión obliga a exponerse a las altas temperaturas de manera prolongada.
De primeras, con las altas temperaturas se produce lo que se conoce como agotamiento por calor, que se manifiesta mediante los siguientes síntomas:
Estos síntomas nos avisan de que la temperatura corporal es demasiado elevada. Es importante hacer caso a las señales antes de que se produzca el golpe de calor, que puede implicar desmayos e incluso pérdida de conciencia.
De igual manera, las temperaturas por encima de los 40 grados de estos días pueden hacer que personas con depresión y ansiedad vean empeorar su estado de ánimo gravemente.
De hecho, estudios demuestran que hay una relación evidente entre la temperatura alta diaria y los suicidios o intentos de suicidio. Por cada aumento de 1 ºC en la temperatura promedio mensual, las muertes relacionadas con la salud mental aumentan un 2,2 por ciento, encontró una investigación publicada en 2021.
Según este estudio, el calor también causa un aumento de los trastornos del estado de ánimo, trastornos mentales orgánicos, esquizofrenia, trastornos neuróticos y de ansiedad.