Crean una placenta artificial en hospitales públicos de Cataluña para salvar bebés prematuros

  • Médicos de Cataluña crean una placenta artificial que logra alargar la vida de un feto animal 12 días

  • Los científicos pretenden poder probarlo en fetos humanos en dos o tres años para mejorar la superviviencia de los bebés prematuros

  • Cada año nacen en Europa unos 25.000 bebés prematuros extremos, cuya mortalidad es del 20%

Los médicos de los hospitales Sant Joan de Deu y Clinic de Barcelona han creado una placenta artificial única en Europa para salvar la vida de bebés prematuros y ultraprematuros. Hasta ahora se ha probado en fetos animales y han logrado 12 días de supervivencia. Los doctores esperan poder probar esta placenta artificial en humanos en dos o tres años.

“La placenta artificial permite mantener a un bebé fuera del útero materno mientras sigue viviendo como un feto, es decir, cubierto de líquido”, explica el doctor Eduard Gratacós, director de BCNatal.

Esta placenta permitirá, por un lado, que los bebés ultraprematuros, los que nacen incluso por debajo de los cinco meses tengan buenos resultados, y por otro, tratar problemas en bebés que en estos momentos no se pueden con cirugía, explica el doctor.

La placenta artificial se ha probado en la primera fase del proyecto, financiada con 3,35 millones de euros de la Fundación La Caixa, con fetos de animales. En concreto con el feto de una oveja, que "cardiovascularmente" es muy similar a los humanos, se ha logrado alargar la supervivencia 12 días.

La doctora  Elisenda Eixarch, coordinadora científica sénior del Proyecto CaixaResearch Placenta Artificial, ha explicado que lo verdaderamente importante es haber conseguido la supervivencia del feto esos 12 días fuera del vientre de la madre.

¿Cómo funciona la placenta artificial?

Al feto hay que sacarlo rápidamente y con sumo cuidado del vientre materno, cortándole el cordón umbilical y conectándolo al de la placenta artificial. Este proceso calve lo han llama transición y han logrado un 100% de éxito.

Después, el feto entra en circuito que reproduce la estructura de la placenta para que no note cambios. Está "protegido" todo el tiempo con un líquido amniótico en condiciones "perfectas".

Hay que cuidar su nutrición y monitorizarlo las 24 horas del día los siete días de la semana para que pueda salir adelante.

"Cada año nacen en Europa unos 25.000 bebés prematuros extremos. Su mortalidad es del 20% cuando nacen a las 25 o 26 semanas, pero hasta del 80% si son de 22 o 23 semanas", ha destacado el doctor Gratacós. Muchos de los que sobreviven lo hacen con secuelas muy importantes.

De ahí la relevancia de esta placenta artificial que esperan poder probar en humanos en dos o tres años. La siguiente fase del proyecto se invertirán 4,3 millones de euros y esperan empezar este verano.