El historial médico es un documento al que solo pueden acceder el propio paciente y los profesionales que se encargan de la atención sanitaria. Por lo tanto, cualquier persona que lo desee puede solicitar su historia clínica en la Sanidad Pública.
De ese modo lo recoge la Ley básica reguladora de la autonomía del paciente y de derechos y obligaciones en materia de información y documentación clínica, donde se expone todo lo referente a este documento privado de carácter confidencial que recoge datos considerados sensibles. Cabe señalar que según la ley, el derecho de acceso “puede ejercerse también por representación debidamente acreditada”.
Así pues, quien desee tener una copia de su historial clínico tiene dos opciones, pedirla directamente en alguno de los puestos de atención al paciente o solicitarla de manera online. En ambos casos los pasos que deberá dar dependerán de la comunidad autónoma en la que se resida, ya que son las encargadas de su custodia.
En el primero de estos casos, el solicitante debe acudir a su centro de salud o a su hospital de referencia y presentar una solicitud por escrito rellenando el formulario correspondiente. Además, deberá mostrar tanto su DNI como la tarjeta sanitaria. A partir de ese momento deberá esperar a recibir el historial clínico. Como hemos apuntado anteriormente, este proceso puede variar de unas comunidades autónomas a otras.
Más ágil que la opción presencial es acceder a la Historia Clínica Digital del Sistema Nacional de Salud (HCDSNS) de manera online. Para ello, el solicitante tiene que realizar las gestiones en la sede electrónica encargada del área de salud que haya en el portal de su comunidad autónoma.
Una vez localizado el enlace donde realizar la petición, se necesitará el certificado digital para poder llevarla a cabo. Por regla general, el documento se obtiene de forma inmediata, aunque dependerá de los trámites que cada consejería de sanidad autonómica solicite.
En cuanto a los documentos clínicos que se pueden consultar, el Ministerio de Sanidad apunta que, una vez más, depende de cada comunidad autónoma, pero enumera los nueve tipos a los que se puede acceder: la Historia Clínica Resumida, los Informes Clínicos de Alta, de Consulta Externa, de Urgencias y de Atención Primaria, el Informe de Cuidados de Enfermería, y los Informes de Resultados de Pruebas de Laboratorio, de Pruebas de Imagen y de Otras Pruebas Diagnósticas. Habitualmente, se obtiene la Historia Clínica Resumida, la cual se genera en tiempo real y contiene los datos más relevantes del paciente.
Como hemos apuntado, cada persona tiene derecho a acceder a su propia historia clínica, así como el personal sanitario (que está sujeto al deber de secreto). Nadie más podrá, pues se vulneraría la Ley de Protección de Datos. Sin embargo, hay algunas excepciones que conviene apuntar:
En general, en nuestro país el acceso a tu historial médico puede variar dependiendo de la comunidad autónoma en la que te encuentres. Sin embargo, en general, existen varias formas de acceder a tu historial médico:
Es importante tener en cuenta que, en todos los casos, se requiere la autorización expresa del paciente para acceder a su historial médico. Además, en algunos casos, puede ser necesario pagar una tasa por la copia de tu historial médico.