Una nueva combinación farmacológica ha demostrado eficacia en alargar la supervivencia en pacientes con cáncer de páncreas avanzado que no pueden ser operados, en uno de los tumores con peor pronóstico.
El ensayo internacional de fase III NAPOLI-3, en el que han participado el Vall d'Hebron Instituto de Oncología (VHIO) y otros centros del mundo, se ha presentado en el Simposio GastroIntestinal de la Sociedad Americana de Oncología Clínica (ASCO), que se celebra en San Francisco (Estados Unidos).
"Tener una nueva arma terapéutica es un paso más, aunque tenemos que seguir luchando para ampliar aún más la cantidad de fármacos para tratar a estos enfermos", ha destacado en declaraciones a Efe la investigadora del VHIO Teresa Macarulla, que ha formado parte del comité científico de este ensayo internacional.
Esta nueva herramienta terapéutica es importante porque va dirigida a un cáncer con niveles bajos de curación y alta mortalidad.
"Tan solo el 20% de los pacientes con cáncer de páncreas son candidatos a una cirugía, que por ahora es el único tratamiento curativo, y de estos el 80% recae y acaba desarrollando metástasis, por lo que la mayoría de los pacientes de cáncer de páncreas acaba llegando a este estadio", ha indicado Macarulla.
En este sentido, la nueva estrategia terapéutica tiene como objetivo "que puedan vivir más y mejor, porque controlamos la enfermedad y así tienen una mejor calidad de vida", ha añadido.
La nueva combinación farmacológica lleva por nombre NALIRIFOX (contiene irinotecán liposomal con fluorouracilo, leucovorina y oxaliplatino) y está diseñada para esos pacientes con cáncer de páncreas que no son candidatos a cirugía.
En el ensayo clínico de fase III se incluyeron 770 pacientes y la media de la supervivencia general fue de 11,1 meses en los pacientes tratados con el nuevo NALIRIFOX, frente a los 9,2 meses en los que recibieron el tratamiento estándar (gemcitabina más nab-paclitaxe).
La combinación NALIRIFOX consta de medicamentos que ya están autorizados y se usan en tratamientos oncológicos, por lo que su seguridad y eficacia ya está probada.
Para Macarulla, este elemento podría acelerar los trámites para su validación por parte de las autoridades sanitarias, una vez superada la fase III del ensayo.