Qué es el Sarcoma de Ewing, el tipo cáncer poco conocido al que Elena Huelva ha dado visibilidad
El Sarcoma de Ewing es un tipo de cáncer que se origina en los huesos o en el tejido blando que los rodea
En España cada año se detectan 30 casos de Sarcoma de Ewing en menores de 14 años
Oleada de apoyo a Elena Huelva en la Red tras su delicado estado de salud: desde Manuel Carrasco hasta Aitana
La influencer Elena Huelva sorprendía este domingo a sus seguidores al compartir su delicado estado de salud: "Las cosas no están yendo bien", aseguraba la sevillana, que lleva años tratando de dar visibilidad al cáncer que padece, un Sarcoma de Ewing.
MÁS
En España cada año se detectan 30 casos de Sarcoma de Ewing en menores de 14 años, pero, ¿qué es esta enfermedad y qué tratamientos tiene?
¿Qué es el Sarcoma de Ewing?
Se trata de un tipo de cáncer poco conocido que suele afectar a niños y adolescentes y que suele ser diagnosticado antes de los 20 años. Aunque es más común en niños, puede ocurrir a cualquier edad, pero es más frecuente en hombres que en mujeres.
Se origina en los huesos o en el tejido blando que los rodea, provoca fiebre, dolor, sensibilidad, posible ruptura de huesos, pérdida de peso, mucho cansancio y lo más grave, se extiende con rapidez y alcanza metástasis en diagnósticos tardíos. Alejandro Lequio, hijo de Ana Obregón, también padeció este tipo de cáncer.
Los síntomas del Sarcoma de Ewing
Los síntomas del Sarcoma de Ewing pueden ser, según recoge el Instituto Nacional del Cáncer:
- Dolor o hinchazón en brazos, piernas, pecho, espalda o pelvis
- Una masa en los brazos, las piernas, el pecho o la pelvis.
- Fiebre sin razón conocida.
- Huesos que se quiebran sin razón conocida
La tasa de supervivencia para personas que padecen esta enfermedad a cinco años es del 62%. Si el tumor solo se encuentra en su lugar de origen esta tasa aumenta al 82%. El sarcoma de Ewing, sin embargo, tiene en la actualidad una posibilidad de curación inferior al 20 por ciento para aquellos pacientes que presentan con una enfermedad diseminada (metástasis) o que sufren una recaída post-tratamiento.
Entre los tratamientos para acabar con esta enfermedad se encuentra la quimioterapia, que con frecuencia es el primer tratamiento que se administra durante unos 6 a 12 meses, la radioterapia, la cirugía o la quimioterapia de dosis alta con rescate de células madre.