¿Qué alimentos inflaman el hígado y ponen en riesgo tu salud?

  • El hígado es el órgano más grande del cuerpo y uno de los más importantes: purifica la sangre, almacena energía y elimina toxinas

  • Determinados alimentos pueden contribuir a su bienestar mientras que otros dificultarán su función, entre otras cosas, provocando hinchazón

  • Alertan de un aumento del 55% de los casos y muertes por cáncer de hígado para 2040 si no se prioriza su atención

Nuestro organismo funciona como un mecanismo perfecto en el que cada pequeño elemento cumple su función: uno de los órganos más importantes para que todo lo demás se encuentre en su mejor estado posible es el hígado, encargado de purificar la sangre; de extraer nutrientes como carbohidratos, lípidos y proteínas; de almacenar energía y de eliminar toxinas. Se trata, además, del órgano de mayor tamaño dentro del cuerpo. Dada su importante función, no es de extrañar que existan múltiples enfermedades que pueden afectarle y que la alimentación y estilo de vida que mantengamos influyan en su estado. De hecho, uno de cada cuatro adultos sufre alguna dolencia hepática. Para que tu hígado funcione como la seda y, con él, todo lo demás, toma nota de cuáles son los alimentos que inflaman el hígado.

¿Qué alimentos inflaman el hígado?

El hígado es un órgano clave para el correcto funcionamiento de todo nuestro organismo y, por diversos motivos, puede llegar a inflamarse. El término médico para ello es hepatomegalia y uno de sus síntomas más frecuentes, tal y como recuerda Mayo Clinic, es el dolor abdominal y el color amarillento en la piel y en la parte blanca de ojos. Dado que en nuestro hígado se 'filtra' aquello que consumimos, alimentarnos correctamente es básico para mantener un hígado sano. Así evitaremos darle más trabajo de la cuenta, así como sufrir en el futuro enfermedades hepáticas.

Toma nota de cuáles son los alimentos que peor sientan al hígado y que pueden inflamarlo:

  • Azúcar. No te será difícil distinguir los alimentos o sustancias que debes evitar para proteger tu hígado, ya que son las mismas que se recomienda evitar para esquivar todo tipo de enfermedades. No es ningún secreto que un consumo excesivo de azúcar resulta muy perjudicial: el hígado también sufre la presencia de azúcar, por lo que es mejor evitarla en la medida de lo posible.
  • Sal. Si bien consumir sal es necesario, en general tendemos a pasarnos de la cantidad diaria recomendada, que es 5 gramos (algo menos de una cuchara de te). Si tomamos mucha sal tendremos más probabilidad de tener un hígado graso, entre otras muchas cosas. Aumentará también nuestra presión arterial.
  • Alcohol. El efecto nocivo del alcohol sobre nuestro hígado es quizás el más conocido de todos y, de hecho, muchas enfermedades hepáticas se relacionan con un consumo excesivo de esta sustancia. Si te pasas con la bebida, tu hígado funcionará peor e incluso podrás provocar la destrucción de las células hepáticas, desarrollando una hepatitis o una cirrosis como consecuencia.
  • Harinas refinadas. En general, consumir carbohidratos en exceso evitará que la grasa sea utilizada como energía, almacenándose en el hígado cuando no sean utilizadas. Aparecerá entonces la obesidad. Evítalo manteniendo una dieta equilibrada y evitando abusar de este tipo de productos. Evita, en general, los alimentos procesados, ya que suelen ser ricos tanto en sal como en este tipo de harinas.
  • Grasas saturadas. Las encontramos en carnes grasas, embutidos, grasas animales... y resultan perjudiciales para nuestro hígado y para todo nuestro organismo. Su consumo debe limitarse.
  • Condimentos. Las especias también pueden inflamar tu hígado, por lo que conviene usarlas con moderación en tus comidas.

Mucho cuidado también con el consumo de medicamentos: algunos pueden resultar perjudiciales para el hígado, por lo que deben tomarse siempre siguiendo las indicaciones de tu médico, evitando mezclarlos con alcohol o tomarlos con el estómago vacío. Si evitas fumar, mantienes un peso saludable y haces ejercicio, estarás protegiendo todo tu organismo... incluyendo a tu hígado.