Los riesgos dermatológicos en la realización de tatuajes y piercings en los adolescentes

Según la Asociación Española de Pediatría (AEP), hasta un 33% de adolescentes de 3 y 4 de la ESO se han realizado piercing y tatuajes, y al 80% de este grupo de edad les gustaría hacérselo en un futuro.

Tal como ha explicado el doctor Fernando Baixauli, pediatra, "cada vez existe más aceptación y permisividad con las técnicas del body art y los adolescentes lo ven como una decisión personal de algo que está de moda y que no tiene otra implicación más que la del culto al cuerpo, como el que se tinta el pelo o lleva sombrero, y se suele elegir por una cuestión grupal, imitación de sus ídolos o por afianzar su identidad".

Por lo tanto, ante esta "batalla perdida" de muchos padres, "se debe intentar que los adolescentes estén bien informados sabiendo que la edad legal para poderlo hacerlo con permiso de los padres es a partir de 16 años, a excepción de pezones y área genital, que no admite consentimiento hasta que son mayores de edad".

El especialista ha subrayado que "lo primero es sentarse con ellos y explicarles que son procedimientos dolorosos, no exentos de riesgos y complicaciones y, sobre todo en el caso de los tatuajes, definitivos o muy difíciles de eliminar, sin embargo, si definitivamente están convencidos de decorar su cuerpo, se debe ayudarles a decidir qué y en que parte se lo quieren hacer, y sobre todo es clave acudir a centros profesionales que reúnan las condiciones higiénico-sanitarias exigidas por ley".

"Eso implica que el tatuador o el que realiza el piercing utilice guantes estériles de látex, así como que los materiales sean desechables y que los tintes y colorantes tengan fecha de caducidad", ha añadido.

Además, se debe tener en cuenta que los jóvenes deberán estar vacunados de la hepatitis B y del tétanos. "Tras la realización del procedimiento, -ha comentado el especialista-, el adolescente podrá tomar ibuprofeno cada 12-24 horas durante unos días, para disminuir el dolor y la inflamación".

Tatuajes

El doctor Baixauli da una serie de consejos con respecto a los tatuajes, "hay que evitar realizarlos en zonas con cicatrices o enfermedades cutáneas como psoriasis o líquen, y las tintas, sobre todo las de color rojo, amarillo, verde y azul pueden producir alergia, por ello, es conveniente hacer una prueba previa con un par de puntos una semana antes".

Después de realizarse, el tatuaje permanecerá durante 1 a 5 horas cubierto con un vendaje de plástico trasparente. Se lavará con agua y jabón y se secará con gasa o toalla limpia sin arrastre, "a golpe", a continuación, se aplicará una crema antibiótica, y todo esto se realizará 3 veces al día durante 10 días. "Pasado este tiempo, -ha agregado el doctor Baixauli-, será conveniente aplicar una crema hidratante, así como evitar la exposición al sol durante al menos 2 semanas. Luego aplicar factor de protección 30".

El profesional aconseja "evitar piscinas, jacuzzis o baños turcos durante al menos 3 semanas y si se percibe hinchazón o inflamación, se puede aplicar hielo en la zona del tatuaje y si en cualquier momento nota dolor, supuración, fiebre, picor o inflamación importante, hay que acudir de inmediato al dermatólogo".

Piercing

Según el especialista, es importante que el piercing sea de un material adecuado que no de problemas como el acero quirúrgico, oro sólido de 14 a 18 quilates, niobio, titanio o platino. "Materiales como níquel, cinc o vanadio pueden producir reacciones alérgicas, o llevar componentes tóxicos, nocivos para la salud", ha dicho. Según la legislación vigente, las pistolas sólo deben utilizarse en el lóbulo de la oreja y, además, "hay que tener en cuenta que localizaciones como la lengua o los labios tienen más riesgo de infección".

Entre los riesgos del piercing, el profesional ha enumerado "una posible infección local, tanto bacteriana como vírica; infección general como hepatitis, sífilis, SIDA, tétanos, así como mayor riesgo de endocarditis en personas con cardiopatías congénitas; hemorragia; alteraciones de la cicatrización como queloides y cicatrices sobreelevadas y alteraciones dentales en piercings realizados en lengua y labios".

El doctor Baixauli ha subrayado que "una vez realizado, se deberá llevar un exhaustivo cuidado de la zona y del piercing durante el proceso de cicatrización, esta dependerá mucho de cada persona y de la zona elegida, pero, mientras dura la cicatrización, es fundamental llevar una higiene adecuada: lavarlos 2-3 veces al día con un jabón antibacteriano, y evitar cremas y maquillajes durante el proceso de cicatrización".

Para los realizados en boca o cavidad oral, se debe estrenar nuevo cepillo de dientes, lavarlos con frecuencia durante el día. Así mismo hay que utilizar un enjuague bucal antibacteriano sin alcohol y evitar en estas zonas, el consumo de alcohol, tabaco, chicle y picante.