La sensación de tener los oídos tapados puede ser muy molesta y a veces causa incluso dolor. Nos pasa cuando buceamos, cuando entramos en un túnel con el coche o cuando montamos en avión, por ejemplo. Pero, ¿cuáles son realmente las causas y cómo se trata?

Generalmente la sensación de oídos tapados sucede por algo muy puntual y desaparece al poco tiempo. Pero si el taponamiento es recurrente y molesta más de la cuenta, puede ser señal de una infección o algún problema de oído.

Además, a veces los oídos taponados pueden dar dolor, comezón e incluso vértigos o fiebre, en cuyo caso hay que acudir al médico para buscar una solución.

La acumulación de cera en los oídos es la causa más típica de esa sensación de oídos tapados. La cera es una sustancia que generamos de manera natural y tiene una función necesaria en los oídos, pero en exceso dificulta el paso del sonido.

Solución: muchas veces los tapones de cera se producen porque limpiamos los oídos con bastoncillos y empujamos la cera, en vez de quitarla. Si llegamos al punto de sentir ese tapón, usar bastoncillo es lo último que debemos hacer. Es preferible acudir a un otorrino para una limpieza profunda y aprovechar para que nos recomiende hisopos o un spray.

Los tapones también pueden ser por acumulación de agua, sobre todo si hemos pasado mucho tiempo en el mar o la piscina. Si el agua entra muy profunda no solo puede ser molesta sino que además puede causar infecciones.

Solución: la única manera de solucionarlo es sacando el agua. Puedes intentarlo por tu cuenta inclinando la cabeza o con una toalla intentar secar, pero lo mejor siempre es ir a un otorrino que nos mire el oído. Además, si te pasa frecuentemente, procura usar tapones para bañarte en verano.

Entre el oído medio y la parte trasera de la nariz se encuentra la trompa de Eustaquio, que puede infectarse por ejemplo por un resfriado o una sinusitis.

Solución: generalmente, cuando la sensación de oídos tapados es por esta causa suele pasarse cuando nos curamos del resfriado o la sinusitis que lo causa. Si no es así, acude al médico para comprobar que no hay una infección mayor.

Como decíamos al principio, es frecuente que sintamos los oídos taponados cuando buceamos, cuando entramos en un túnel con el coche o cuando montamos en avión, por ejemplo. Esto es por el cambio brusco de presión del aire, que puede incluso hacer que sintamos picor o dolor.

Solución: puedes probar a bostezar si no se te pasa solo, o masticar chicle. En el caso de los aviones, es aconsejable respirar por la boca en el despegue y por la nariz en el aterrizaje para evitar que se taponen los oídos.

La infección en el oído es conocida como otitis, y causa esa sensación de oído tapado. Lo que ocurre es que se inflama el canal auditivo o se produce una infección. Puede ir acompañado de enrojecimiento del oído y algo de fiebre.

Solución: es necesario ir al médico para que nos ponga un tratamiento y analice la causa de la infección.

El colesteatoma es un problema menos común del oído. Se da en personas con infecciones recurrentes por un crecimiento anormal de piel en el canal auditivo, lo cual dificulta el paso del sonido.

Solución: el otorrino suele recomendar el uso de gotas, pero en los casos más graves se puede realiza una cirugía sencilla.

Por último, una de las consecuencias del bruxismo, es decir, apretar la mandíbula ya sea por la forma de la misma o por una tendencia a hacerlo inconscientemente, es la sensación de tener los oídos taponados.

Solución: la solución para el bruxismo debe dárnosla un dentista. Se suele tratar con fundas para dormir que evita la contracción de los músculos de la mandíbula.