El cuerpo humano puede soportar temperaturas muy altas y muy bajas, pero tiene un límite. La ola de calor extremo que ha afectado a España en las últimas semanas ha causado más de 600 muertes, en su mayoría en personas mayores y trabajadores expuestos. ¿Cuál es la temperatura más alta que el organismo es capaz de soportar y cuáles son los peligros de superarla?
La temperatura del cuerpo suele oscilar entre los 36 y 37,5 grados centígrados. Cuando se desploma por debajo de los 35 ºC, corremos el riesgo de sufrir una hipotermia, y a más de 38 ºC entramos en peligro de hipertermia, lo contrario. Cuando esto ocurre, aparecen los síntomas de golpe de calor.
Una persona joven y sana que se expone a 40 grados necesita estar bien hidratada, protegerse del sol y no realizar sobreesfuerzos. Pero incluso así, el cuerpo podría no verse capaz de soportar tanto calor, de lo cual nos alertará de varias maneras.
Los golpes de calor empiezan con sudoración excesiva, un mecanismo de nuestro cuerpo para autorregular su temperatura, puesto que las gotitas de sudor refrescan la piel al evaporarse, y además es una manera de expulsar calor interno. Los vasos sanguíneos se dilatan y envían sangre a las extremidades, por eso nos ponemos rojos y sudamos: de este modo el cuerpo libera calor.
Después de un rato, la piel se empieza a poner más roja, se seca y empezamos a tener dificultad para hablar y caminar, y la respiración y el pulso se aceleran. Significa que la temperatura del cuerpo está aumentando, y puede darnos fiebre. Llegados a este punto es importante llamar a emergencias o ir a un hospital cercano, además de beber agua y buscar una sombra.
Síntomas más graves de un golpe de calor incluyen los escalofríos, convulsiones, taquicardia, fatiga, náuseas y vértigo. La persona puede sufrir pérdida de consciencia y desmayarse, incluso puede entrar en coma.
La temperatura máxima que un cuerpo puede soportar depende de muchos factores. La edad, el estado de salud, el clima al que estamos acostumbrados y, sobre todo, el nivel de humedad son fundamentales. Generalmente, si la temperatura corporal asciende a más de 46 ºC la urgencia médica es máxima. Sin atención inmediata las secuelas pueden ser para toda la vida, y podemos incluso morir.
Con humedad nuestro cuerpo aguanta menos tiempo expuesto al calor. Cuando el ambiente es muy húmedo el sudor no se evapora y nuestro cuerpo se ve incapaz de controlar su temperatura interna, por lo que debemos protegernos más.
Además hay que conocer los factores de riesgo: