El denominado 'Covid persistente' puede afectar a aproximadamente el diez por ciento de los pacientes que tuvieron Covid-19. Esta afección afecta diferente a cada parte de nuestro cuerpo, y entre los síntomas que sufren los pacientes con covid persistente hay uno que afecta a tu reposo: los trastornos del sueño.
El término 'Covid persistente', según la definición realizada por expertos internacionales y publicada en la revista científica 'The Lancet Infectious Diseases', se refiere a los síntomas que se producen en personas con antecedentes de infección probable o confirmada de Covid-19, generalmente tres meses después del inicio, que duran al menos dos meses y no pueden explicarse con un diagnóstico alternativo
Se han descrito múltiples síntomas que pueden fluctuar o persistir en el tiempo, empeorar con el esfuerzo físico y mental y provocar limitación de la capacidad funcional. Los más frecuentes son cansancio, malestar general, dolor muscular y articular, mareos, fiebre y también destacan los trastornos del sueño. Entre los síntomas respiratorios, los más comunes son tos y sensación de falta de aire, también pueden producirse síntomas digestivos como diarrea, pérdida de apetito y dolor de estómago.
Respecto al trastorno del sueño, un estudio de la Clínica Cleveland señala que el 40% de los pacientes con covid persistente padecen esta afección. Además, el estudio también señala que los pacientes negros son tres veces más propensos a sufrir trastornos del sueño que el resto de pacientes.
La pandemia de coronavirus "ha disparado" las cifras de casos de insomnio y los sueños de contenido "angustioso", según las coordinadoras de la Unidad de Trastornos del Sueño y Ventilación del Hospital Valdecilla, las doctoras Mónica González y Marian Martínez.
La incertidumbre ante el futuro, junto al miedo a la enfermedad o a la muerte de familiares o de nosotros mismos "ha generado un estrés tremendo" que ha repercutido en la calidad del sueño nocturno, han señalado las especialistas en una entrevista al Colegio de Médicos de Cantabria.
Así, "se han disparado las cifras de insomnio y la presencia de sueños bizarros, de contenido angustioso, entre la población general y entre los profesionales sanitarios que han estado trabajando en primera línea y manejándose con dilemas éticos importantes", han indicado.