Las personas con niveles muy elevados de optimismo, se asocian con una vida más larga y una mayor probabilidad de vivir más allá de los 90 años. Esto lo ha demostrado un estudio realizado a un grupo racialmente diverso de 159.255 mujeres y liderado por la Escuela de Salud Pública TH Chan de la Universidad de Harvard (Estados Unidos). El trabajo aparece publicado en la revista ‘Journal of the American Geriatrics Society’.
La investigación ha sugerido que el optimismo está asociado con un envejecimiento saludable y una longevidad excepcional, pero la mayoría de los estudios se realizaron entre poblaciones blancas no hispanas. En el estudio se examinó las asociaciones de optimismo con la longevidad entre grupos raciales y étnicos y evaluamos el estilo de vida saludable como una posible vía de mediación.
Se realizó un cuestionario a cada una de las participantes y estas debían responder de forma extensa y completa. Los participantes de la Iniciativa de Salud de la Mujer completaron una medida validada de optimismo y proporcionaron otros datos demográficos y de salud al inicio. Se evaluaron las asociaciones de optimismo con incrementos en la esperanza de vida usando modelos de tiempo de falla acelerada y con la probabilidad de una longevidad excepcional (supervivencia a la edad ≥90) usando modelos de regresión de Poisson. El análisis de mediación causal exploró si los factores relacionados con el estilo de vida mediaban asociaciones entre el optimismo y la esperanza de vida.
Los propios autores del trabajo apuntaron que esta investigación no es nueva, ya que se habían llevado a cabo otras investigaciones sobre la cuestión cuyos resultados reman hacia la misma dirección. Pero la mayoría de estos trabajos se habían realizado con cohortes poco diversas en algunos aspectos.
El estudio revela que el 25% de las personas más optimistas que participaron en el estudio presentan un 5,4% más probabilidades de tener una mayor esperanza de vida y un 10% más de superar los 90 años que el 25% de las más pesimistas.
Un mayor optimismo se asoció con una vida más larga y una mayor probabilidad de lograr una longevidad excepcional en general y entre grupos raciales y étnicos. La contribución del estilo de vida a estas asociaciones fue modesta. El optimismo puede promover la salud y la longevidad en diversos grupos raciales y étnicos. La investigación futura debería investigar estas asociaciones en poblaciones menos longevas.