Los mejores trucos para dormir en la playa y que la humedad y la arena no te martiricen
Elsa Alonso
18/04/201807:57 h.Antes de empezar con los consejos, una aclaración: en gran parte de las playas españolas está prohibido acampar por la noche en la arena, así que tendrás que buscar algón rincón asalvajado. Las máquinas de limpieza comienzan su tarea cuando cae el sol y los carteristas se multiplican para robar a gente que está de fiesta en el paseo marítimo o se ha quedado roque con el sonido de las olas. Si, a pesar de todo esto, quieres lanzarte a la vida salvaje y echarte una cabezadita, toma nota:
Si llevas días maquinándolo
Como sabes, por mucho calor que haya hecho (o esté haciendo), el frío y la humedad son los protagonistas en una playa cuando se va el sol. La arena se queda húmeda al contacto con el mar, el aire transporta partículas de agua procedentes de las olas y se queda del ambiente. Por eso, te aconsejamos que antes de lanzarte a la aventura, te prepares bien:
- Los supervivientes de Honduras cuentan con una lona para mantener a raya el rocío y cortar la humedad. Tú puedes usar una tela impermeable para echarte por encima y garantizar que la piel no esté en contacto con las gotitas de agua y el rocío mañanero.
- Sudadera, jersey, manta, saco de dormir: todo es bien recibido.
- Es importante que las capas más externas de ropa sean de un tejido que sea impermeable o que no absorba la humedad.
- La esterilla es tu amiga: Mucho. Todo el rato. No te la olvides.
- Colócate estratégicamente: Pon atención a dónde sitúas la esterilla o toalla base. Podría ser útil tener a mano una linterna para ver la zona y despejarla de conchas rotas que te pueden pinchar o de algas que mojen la cama.
Si ha surgido de manera improvisada:
- Doma la arena y hazte una colchón con la forma de tu cuerpo, cabeza y cuello: te ahorrarás alguna que otra contractura.
- Aíslate lo más posible de la arena: Si hay hojas alrededor, estás de suerte. Hacer una cama sobre los huecos de la arena con hojas ayudará a que la superficie quede más seca y transmita más calor. Recuerda: tu gran enemigo es la humedad, así que cualquier cosa que te aisle del suelo será tu aliado.
- Jerseys, camisetas, todo: abre la mochila, todo lo que tengas a mano puede servirte para ponértelo o para ayudar a aislar.
EXTRA: Un truco contra la arena pegada
Se pega, te entra en los ojos avivada por el viento y se queda fría al no estar en contacto con los rayos de sol. Si tu cuerpo ha quedado embadurnado con ella y limpiarte con agua te dejaría congelado, hay una solución: los polvos de talco. Lleva un bote en tu bolso siempre que vayas a la playa y echa un poco en tu piel. No hacen falta grandes cantidades, solo frotarlo sobre el cuerpo... y la arena se despegará automáticamente.