Qué es el turismo del sueño, la tendencia en viajes que arrasa

El nuevo turismo propicia el descanso y el relax

Durante años, los grandes y pequeños viajes se han centrado en el deseo por recorrer destinos turísticos sin dejarnos ninguna joya sin conocer. Circuitos exhaustivos para ver con nuestros propios ojos monumentos, rincones escondidos de los que todo el mundo habla, museos, el restaurante al que acudía alguna celebridad… Ritmos frenéticos en días de ocio que hacían necesarias unas vacaciones después de las vacaciones. Ahora, en cambio, el ocios se ha posicionado en la búsqueda del descanso, redefiniendo nuestra forma de hacer turismo para, precisamente, huir del estrés. Así, el turismo del sueño es la tendencia en viajes que arrasa en los últimos tiempos y con la que se pretende volver a casa sintiéndonos descansados y renovados. 

Así es el turismo del sueño

Se trata de una tendencia en viajes que tiene como objetivo conseguir que nos relajemos y alcancemos un descanso profundo, no solo a la hora de dormir, y que se encamina a alcanzar el máximo bienestar posible. Se consigue, en términos generales, con una acertada combinación de destinos, alojamientos y planes. La naturaleza tiene un papel destacado, como era de esperar, ya que está más que comprobado que los entornos naturales consiguen reducir los niveles de estrés acumulado, favorecen el descanso y mejoran el ánimo. Rodearnos de verde o estar cerca del mar, un río o un lago tiene un impacto positivo en la salud, y somos cada vez más conscientes de cómo nos beneficia. Pero no solo importa el destino, tal y como te contamos.

Alojamientos para favorecer el descanso

Los alojamientos turísticos están al tanto de esta demanda de su clientela y procuran ofrecer aquello que se busca. Por eso destacan entre sus punto fuertes los espacios libres de ruido, la configuración de las habitaciones o la calidad de los colchones. Los hoteles y hospedajes se convierten así en una especie de refugio terapéutico en el que todo importa: lo que vemos, lo que oímos y lo que sentimos. La iluminación es otro punto a tener en cuenta, sin estridencias, al igual que el acceso a la tecnología, que se vuelve limitado o nulo. La intención es desconectar, descansar y reponernos del ajetreo del día a día, no visitar 7 países en 5 días.

También desaparecen los hilos musicales o, en su defecto, se convierten en una melodía zen de fondo. Además, aquellos alojamientos que ofrecen servicios añadidos, los enfocan a este turismo del sueño: masajes, spa, rutas por la naturaleza… Y una cuidada restauración, faltaría más. Esto se intensifica en aquellos destinos en los que el entorno no es especialmente relajante. Es decir, si vas a recorrer las calles de Manhattan, cuando llegues al hotel todo debe estar a punto para que bajes pulsaciones y te entregues al descanso más placentero. 

La principal actividad es no hacer nada

Con esto nos referimos a que las actividades no buscan agotarnos o saturarnos con un exceso de información, sino todo lo contrario. Si el entorno está a favor y es, como se viene prefiriendo, un espacio natural, los paseos y rutas para descubrirlo se convierten en la opción preferida. Y es que todo suma para que empecemos a notar cómo el relax y el bienestar se apodera de nuestra mente y nuestro cuerpo. 

Como te decíamos, los spas cobran gran importancia, tanto si están en el hotel como si no. De hecho, los balnearios son un objetivo claro, tanto para visitar y probar sus tratamientos, como para que sean el alojamiento en el que hacernos un reseteo al completo. La clave es olvidar todo aquello que pueda resultar frenético, cansado o una sobrecarga de información. Dejando eso a un lado, las opciones son tan sencillas y efectivas como sentarse a leer o dar un paseo. 

¿Por qué beneficia el turismo del sueño?

Conseguir relajarnos y disfrutar de un descanso profundo son ya grandes beneficios que justifican sin necesidad de nada más el turismo del sueño. Y es que dormir bien y disfrutar de la calma es clave para mejorar nuestra salud física y mental, logrando algo tan difícil como disponer de un espacio y un tiempo para reconectar con nosotros mismos, recargarnos de energía y darle a la tranquilidad y la calma el valor que tiene. Aunque al volver a casa nos esperen las obligaciones y el ajetreo, muchas veces practicar el turismo del sueño nos beneficia también en el día a día porque, después de haber experimentado el relax y el descanso, es más probable que revisemos nuestras rutinas para que estas pausas no se conviertan solo en una excepción pasajera.

El destino más top para el turismo del sueño

Lo más probable es que no tengas que recorrer muchos kilómetros para encontrar un lugar que reúna las condiciones de las que hablamos, así que puedes practicar el turismo del sueño allí donde tú creas que vas a encontrar calma y la posibilidad de disfrutar de un sueño reparador. Aún así, hay que mencionar que Suecia es el país pionero en este tipo de turismo, que está muy fomentado y que se ha convertido en uno de los destinos más visitados para experimentarlo. La combinación de naturaleza, ritmo de vida pausado y el silencio que se puede apreciar en gran parte del país, lo han situado a la cabeza del turismo del sueño.