Hay ciudades que, durante la época navideña, destacan de una forma muy especial. Esto es lo que les sucede a estas ciudades, que aunque durante todo el año son sorprendentes, en estas fechas tienen un aire renovado que conquista a muchos visitantes que adoran viajar en Navidad.
Estos lugares, reúnen todos los requisitos para que visitarlos en estas fechas se convierta en una de las experiencias más bonitas para cualquier visitante.
Laponia está considerada el hogar oficial de Santa Claus, o mejor conocido por todos por Papá Noél. Por lo que se convierte en el lugar perfecto para los amantes de la Navidad.
Aquí, además de disfrutar de los paisajes nevados que evocan Navidad con solo pisar esta región finlandesa, también se puede visitar Santa Claus Village, y deleitarse con actividades como paseos en trineo y excursiones para ver sus impresionantes auroras boreales.
Si se quiere disfrutar de una Navidad diferente con toda la familia, este lugar brinda una experiencia única e inolvidable.
Praga se transforma en un cuento de Navidad durante esta época. Tanto la plaza de la Ciudad Vieja como la plaza de Wenceslao se iluminan y se llenan de puestos donde se pueden encontrar productos típicos checos.
En la Catedral de San Vito y el Puente de Carlos se puede disfrutar de una estampa navideña preciosa. Esta ciudad es muy acogedora y el aire medieval que se respira en sus calles adoquinadas, hace que los turistas se transporten a otra época.
Se encuentra en la región de Alsacia, y es conocida por sus coloridas casas y sus canales. Colmar, cuando llega la navidad, se decora con luces y adornos para crear un ambiente navideño único. Este destino es ideal para quienes quieren disfrutar de una experiencia tranquila.
En la ciudad se instalan varios mercados navideños que se reparten por el casco histórico de la ciudad, y cada uno tiene un estilo distinto. Allí se puede disfrutar de vino caliente para combatir el frío, artesanías y postres locales en un entorno ideal.
Esta ciudad francesa es conocida como la “capital de la Navidad” europea por su espectacular mercado navideño que se instala año tras año desde 1570. Todas sus calles están decoradas con luces y adornos para transportar a sus visitantes a un mundo mágico.
La ciudad tiene una mezcla entre las culturas alemana y francesa, y eso se refleja muy bien en su gastronomía y en los productos que se pueden encontrar en sus mercados. Uno de los puntos más destacados es la Catedral de Estrasburgo, ya que su fachada gótica se ilumina siendo un espectáculo.
Viena, Austria
Otra ciudad navideña es Viena, la capital austriaca se llena de luces y mercadillos navideños en estas fechas. Éstos se instalan junto a sus palacios y plazas históricas, y se pueden encontrar multitud de adornos hechos a mano y también un montón de opciones de dulces, como pueden ser las famosas galletas de jengibre o su ponche caliente.
Uno de los mercados más destacados es el Mercado de Navidad de Viena en la Rathausplatz, y también, el mercado que se encuentra en el Palacio de Schönbrunn, que tiene un cierto ambiente imperial. Si se es amante de la música clásica, en la ciudad hay numerosos conciertos.
Cuando llega la Navidad, Bruselas se llena de mercadillos navideños, de tiovivos que parecen traídos de otra época y se adorna completamente. En la ciudad belga, la navidad comienza oficialmente el 29 de noviembre, con un gran desfile en la Grand Place y también, con la apertura de todos los mercados navideños, la pista de patinaje y la noria que se encuentran en lo que denominan como ‘Plaisirs d’Hiver’.
En la Grand Place, también se puede ver el gran árbol de navidad y también, un Belén a tamaño real que llama la atención a los numerosos turistas que pasan por allí.
Otra de las ciudades donde se puede disfrutar de la Navidad es Budapest, la ciudad se llena de luces y de decoraciones navideñas, y también, hay unas altas probabilidades de nieve, por lo que se puede convertir en una auténtica estampa navideña.
Los mejores mercadillos son los que se encuentran en la Plaza de San Esteban y en la Plaza Vörösmarty, donde se puede disfrutar de sus platos típicos y bebidas calientes. Y para entrar en calor, lo ideal es visitar uno de sus famosos baños termales.
La ciudad escocesa es increíble durante todos los meses del año, pero en Navidad es aún más mágica. Se pueden visitar sus mercados navideños en Princess Street Garden. Allí se encuentran muchos puestos de regalos artesanales y también, el tradicional vino caliente. Si se busca un mercado más tradicional, también se puede encontrar otro mercadillo navideño en George Street.
Edimburgo ofrece a los turistas diferentes actividades y espectáculos como el espectáculo de luces que se realiza en el Jardín Botánico Real que se llama ‘Christmas at the botanics’. Por otro lado, la ciudad también es conocida por su Hogmanay, una fiesta callejera que se celebra en Nochevieja en su centro histórico, donde los cielos se iluminan para dar la bienvenida al Año Nuevo.
En España, la ciudad andaluza ofrece un espectáculo de luces que no se puede perder. En la calle Larios, se instala año tras año un espectáculo de luces y sonido que ya es una tradición en Málaga.
También se instalan dos mercadillos en los que se pueden encontrar desde juguetes para los más pequeños, adornos para decorar o dulces riquísimos. También, han creado un escenario de luces espectacular en su Jardín Botánico que transportarán a sus visitantes a lugares como Belén o Persia.
Esta ciudad alberga uno de los mercados más populares de toda Alemania, el ‘Christkindlesmarkt’ el cual recibe millones de visitantes cada Navidad. Los turistas disfrutan de su vino caliente alemán ‘Glühwine’ y también de sus tradicionales dulces de jengibre.
La ciudad, además, ofrece numerosos museos y eventos para celebrar la Navidad de una manera especial. Nuremberg es un destino perfecto para quienes buscan disfrutar de esta época del año de una manera tradicional.