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España es un país perfecto tanto para verano como para invierno. Mar o montaña, el país ofrece todo tipo de oportunidades para cualquier viajero que se preste. Muchos son los que ya están pensando en las vacaciones de verano, una época perfecta para acercase a alguna de las más de 3.000 playas que se encuentran en los casi 8.000 km de costa que tiene España.
Existen destinos de playa en toda España, pero hay algunos lugares que simplemente enamoran de manera especial a los que allí plantan la sombrilla. Islas Baleares, Canarias, la Costa Brava, la Costa del Sol… España ofrece una amplia variedad de destinos playeros que bien merecen una visita. Recorremos el país en busca de las playas más deseadas desde donde tomar el sol este verano.
Las playas del Norte de España son una verdadera maravilla, da igual la época del año que sea, siempre son de parada obligada. Entre los municipios de Comillas y San Vicente de la Barquera y junto al Parque Natural de Oyambre, tenemos una de las mejores playas de Cantabria y de toda España. La playa de Oyambre, luce dos Km de arena blanca, dunas y aguas cristalinas. Es uno de los lugares preferidos por los sureros de todo el mundo pues en invierno con las marejadas se convierte en el destino idóneo para practicar este deporte.
La belleza de esta playa deja más que claro la razón por la que los celtas eligieron esta zona para asentarse. Una playa a camino entre lo salvaje y lo místico con restos de dicha tribu. Atravesando un sendero de tierra se llega a un arenal de arena fina y blanca, en la que la paz incita a meterse en el aguda, dando igual lo gélida que esté. Se trata además de una de las primeras playas nudistas de España.
Seguimos en el norte de España para encontrarnos con una playa icónica de Galicia. Muy cerca de Ribadeo se ubica la playa de las Catedrales, un lugar de visita obligada cuando la marea está baja. En bajamar se puede apreciar a la perfección este espectáculo de la naturaleza. Sus arcos de hasta 30 metros de alto y sus cuevas hacen que parezca una catedral esculpida en la roca.
La Costa Brava es uno de los lugares del país en el que se pueden encontrar playas y calas únicas. En medio de los acantilados repletos de pinares y vegetación mediterránea, aparece la Cala d'Aiguablava, con unas aguas que nada tienen que envidiar a las del caribe.
Es precisamente el color del agua la que le otorga nombre: Cala "aiguablava" significa "agua azul", en catalán. Aunque solo tiene 100 metros de longitud, es una de las más bellas del país.
Cala Saladeta es una de las mejor valoradas de toda la isla de Ibiza. Su fondo arenoso y poco profunda hace que el agua sea completamente cristalina. Para llegar a colocar la toalla en la arena de esta cala hay que acceder desde Cala Salada.
Además de una de las más bonitas de España también es muy curiosa, pues se ubica junto a la desembocadura del Río Vallina y tiene forma de embudo, haciendo que desde la zona de la arena no se vea el mar en el horizonte. Cuando la marea sube el agua, de color esmeralda, entra por el canal dejando ver el encanto supremo de esta playa.
Su arena dorada, sus acantilados y sus 250 metros le han servido para ser uno de los escenarios de la serie Juego de Tronos. No solo por eso merece. Una visita, sus acantilados y su valor geológico también la hacen única.
La provincia de Huelva está llena de playas de arena, dunas, y extensos arenales bañadas por las frías aguas del Atlántico. Matalascañas es una de las playas más largas de la zona con más de cinco km de extensión. Se la reconoce por su peculiar "Piedra" que sobresale en la orilla. No es ninguna formación geológica extraña, sino la antigua Torre de la Higuera, una de las torres que protegían el litoral de ataques, pero que no resistió el fuerte maremoto de Lisboa en 1755.
A pesar del tamaño de Menorca, sus calas son de una belleza inigualable. Cala Macarella y Cala Macarelleta, quedaran en el recurdo de todos los que hasta allí vayan para darse un buen baño. Aguas claras, acantilados, pinos… no se les puede pedir más.
Playa Carolina forma parte de las “Cuatro Calas”, y se la considerada una de las mejores playas de Murcia es un rincón virgen del Mediterráneo. Su paisaje está protegido dentro de la Red Natura 2000 debido a su importancia en cuanto a biodiversidad.
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