El buen tiempo ha llegado y es previsible que ya se den pocas jornadas desapacibles durante el verano. Así que es el mejor momento para disfrutar del aire libre y de los maravillosos parajes que alberga nuestro país. Y si bien es cierto que recorrer algunos de ellos es más complicado con hijos, hay otras muchas rutas para hacer con niños en las que no solo disfrutarán los más pequeños, sino también los mayores.
A continuación apuntamos algunas de las mejores opciones para salir a disfrutar de la naturaleza con niños. Todas ellas no solo resultan atractivas para cualquier persona, sino que además no son demasiado largas para que los niños puedan hacerlas con relativa facilidad y los padres que deban llevarlos a cuestas no terminen demasiado cansados.
Lagos de Covadonga. En los últimos años la visita a estos lagos asturianos cuenta con un mayor interés, ya que se han creado varios recorridos que van de uno a siete kilómetros para visitar tanto el lago Enol como el lago Ercina. Además, cerca se pueden visitar las minas de la Buferrera, las cuales llamarán la atención de los más pequeños.
Monasterio de Piedra. Sin duda, se trata de una de esas rutas que harán las delicias de los niños, ya que podrán caminar al lado de la cascada Cola de Caballo y recorrer toda suerte de grutas y senderos donde la vegetación resulta exuberante. Situada en este monasterio zaragozano, la ruta tiene unos cinco kilómetros.
Nacimiento del río Cuervo. Aún más sencilla que la anterior pero igual de espectacular es esta ruta conquense que recorre varias cascadas de indudable belleza. Apenas tiene dos kilómetros de recorrido y es ideal para pasar un rato agradable en el campo.
Parque Natural de las Hoces del Río Duratón. Nos trasladamos hasta Castilla y León, concretamente a la provincia de Segovia. En este caso la ruta es de unos cinco kilómetros y ofrece una vista fantástica de los meandros que el Duratón ha creado con el paso de los siglos. Además, los más avezados pueden bajar hasta el río y contratar un paseo en piragua.
Sendero de los Sentidos. Excelente opción para disfrutar de una ruta con niños en el Parque Rural de Anaga, en la isla de Tenerife. Como su nombre indica, está diseñada para estimular los sentidos y es accesible para personas de todas las edades y capacidades. Además, ofrece tres opciones de ruta circular que se adecúan a las condiciones de los caminantes. En los senderos que recorren el bosque de laurisilva endémico de la región se encuentran paneles interpretativos y estaciones que invitan a tocar, oler y escuchar los sonidos del bosque.
Cañón del río Lobos. Aunque recorrer este cañón al completo puede resultar duro, hay una versión corta que llega hasta el entorno de la ermita de San Bartolomé y que presenta un paisaje realmente espectacular.
Pasarelas del Río Mao. Apenas tres kilómetros tiene esta ruta orensana que transita por pasarelas y miradores para que los niños ni se aburran, ni se cansen demasiado.
Senda fluvial del Nansa. La octava ruta recomendada para hacer con niños este verano es algo más larga, de unos siete kilómetros. Sin embargo, esta senda realizada junto a este río cántabro es sencilla pues su misión original era facilitar el tránsito de los pescadores.
Recomendaciones para hacer rutas con niños
Cualquiera que se haya propuesto caminar por la naturaleza con niños sabe que los preparativos han de ser más concienzudos para evitar cualquier percance de los pequeños. Algunos de los consejos más habituales son los siguientes:
Como hemos comprobado con las rutas anteriores, es necesaria una planificación y optar por senderos fáciles y de corta duración.
Revisar las previsiones meteorológicas y evitar los días extremadamente calurosos o con pronóstico de tormentas.
Vestir a los niños con ropa ligera y transpirable, preferiblemente de colores claros, cuando hace calor. Además, llevar una chaqueta ligera por si cambia el tiempo o incluso un chubasquero.
El calzado de los niños debe ser cómodo y consistente.
Protegerse del sol con sombrero o gorra, gafas de sol y crema solar.
Llevar agua suficiente para todos, así como snacks saludables (frutas, frutos secos, barras de cereal, sándwiches…).
Llevar un pequeño botiquín con vendas, tiritas, desinfectante y, por supuesto, cualquier medicación específica que necesiten los niños.
Asimismo, durante la ruta será adecuado entretener con juegos a los niños y hacer descansos regularmente.