Hablar de verano es hablar de fiestas patronales. Numerosos municipios y localidades españolas aprovechan el buen tiempo para celebrar sus respectivas festividades y, además de las verbenas, la orquesta, los conciertos a cargo del ayuntamiento y la instalación de las ferias, estos eventos casi siempre incluyen algún espectáculo de pirotecnia. Consecutivamente, los cielos que cubren nuestra geografía se van llenando de fuegos artificiales que, si bien son un regalo para vista, pueden ser también un infierno auditivo. El estruendo que generan dichos castillos de luces y los demás petardos afectan especialmente a los animales, siendo los perros la especie que más los adolece.
Ahora que se acercan las celebraciones populares - tienen lugar entre los meses de junio y septiembre - , PACMA ha recordado que los animales que poseen una sensibilidad auditiva más aguda, como "perros, gatos y aves, pueden morir o desarrollar cuadros graves de ansiedad como resultado de los estruendos". Los ruidos y destellos de los fuegos artificiales han provocado, año tras año, accidentes, caídas y extravíos, pues son muchos los perros y gatos que , asustados por el fuerte sonido, huyen despavoridos y, luego, no saben volver a sus hogares.
El partido animalista, en plena campaña de las elecciones al Parlamento Europeo, aboga por el uso de una alternativa silenciosa que permita disfrutar de celebraciones festivas sin causar daños a los animales ni perturbar la tranquilidad de los vecinos. Propone el uso progresivo de tecnologías de iluminación y efectos visuales que proporcionen un espectáculo de altura sin recurrir a artefactos explosivos. Con ello, no sólo se evitaría un problema de salud, física o mental, a animales, mayores y niños; también se ahorrarían "kilos y kilos" de restos contaminantes que caen sobre las calles y edificios tras la finalización de los fuego y se reduciría el riesgo de incendios.
PACMA es muy consciente del registro de perros muertos que hay cada año por el ruido de los petardos. Tras más de una Nochevieja han tenido que denunciar el fallecimiento de canes que, con un miedo insuperable, se han tirado por las ventanas de sus pisos de residencia. Por eso, la formación ha convocado una concentración este martes 4 de junio a las 10.30 horas frente al Congreso de los Diputados para pedir, al menos, la reducción del impacto sonoro de los petardos y, además, hablar de algunas de sus propuestas como las fuentes caninas de cara al verano, la reducción de las facturas veterinarias a las familias españolas o la rebaja del IVA.
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