Se acerca el buen tiempo y con eso, la ganas de ir a la playa y empiezan las dudas de muchos sobre si hay tiburones o no en aguas españolas. Lo cierto es que cada vez son más los avistamientos de escualos en las playas o cerca de ellas. Como país con un importante componente marítimo hace que, aunque no veamos con mucha frecuencia a estos peces están más que presentes en la costa.
Como muchas especies marítimas los tiburones no son animales de arraigo a zonas únicas, por lo general tienen hábitos migratorios basados en su época de reproducción, alimentos y cambios en las condiciones del agua como la temperatura.
Aunque no se trata de un animal peligroso con intención de atacar a los humanos, es sin duda uno de los más temidos y, solo en el Mar Mediterráneo, se calcula que hay hasta 45 variantes de tiburones diferentes. La mayoría de los tiburones que llegan hasta las playas españolas son inofensivos como el peregrino, el cazón, la cañabota gris o la tintorera.
Desde hace unos 10 años los avistamientos de tiburones en nuestras cosas han ido en aumento, el cambio climático, la sobrepesca y la mayor investigación y monitorización de escualos son algunas de las razones de este notable aumento de tiburones en las costas españolas.
La mayoría de los tiburones en el país suelen estar en el Mar Cantábrico y Mediterráneo, por lo general los que se encuentran en el Mediterráneo son especies más inofensivas. No obstante, en las aguas más frías como el Atlántico y el Cantábrico, y en mayores profundidades en estas regiones, son el hábitat de grandes tiburones. Las especies más habituales en nuestras costas son aquellos de menor extensión, que están entre unos 2,5 metros y 80 kilos, como es el caso de las pintarrojas o los cazones.
El verano del 2023 fue un año de importantes avistamientos de tiburones en las costas españolas. Islas Baleares, Islas Canarias, Comunidad Valenciana, Cataluña, Granada, Galicia y Asturias, fueron solo algunas de las zonas por los que pasearon tiburones.
Según Nautical Channel, en Galicia, se han dado casos sorprendentes de de tiburones blancos en la Ría de Vigo, con ejemplares que superan los 10 metros de longitud y los 100 kilos de peso. La playa de la Patacona, en Alboraia, y en la playa de las Arenas en la zona de Valencia también se han visto escualos al igual que en Alicante en aguas de Tabarca. Incluso un hombre fue mordido por una tintorera.
Las Islas Baleares, como Ibiza y Mallorca, son otro lugar donde se encuentran tiburones, pero generalmente son de tamaño pequeño y no representan un peligro para los bañistas. El mes de junio pasado una tintorera también se dejó ver durante horas en el puerto de Ciutadella, en Menorca. Y unos días después, un tiburón de la especie cañabota gris fue avistado en el cabo Formentor, en Mallorca.
Las playas de Granada, ante sorpresa de muchos, es uno de los lugares donde más tiburones hay. Durante la pandemia, las playas estuvieron vacías y tranquilas, lo que hizo que una gran cantidad de tiburones peregrinos llegaran a las playas de la Mamola y a Calahonda.
El avistamiento de tiburones en las costas canarias es muy común. Se han documentado hasta 86 especies y rayas, como el angelote, el pez martillo, el Solrayo o el tiburón-ballena.