¿Se pueden recurrir las multas por alcoholemia?

  • Existen mecanismos legales para recurrirlas en caso de que se detecten irregularidades en el procedimiento

  • Es importante ser conscientes de que recurrir una multa por alcoholemia no garantiza su anulación

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Las sanciones por conducir bajo los efectos del alcohol son una de las infracciones más graves en la normativa vial vigente,  y conllevan tanto sanciones económicas, como pérdida de puntos del carné, y llegando incluso penas de prisión en casos extremos. Sin embargo, es importante saber que es posible recurrir estas multas si existen ciertas irregularidades en el procedimiento o en la obtención de las pruebas.

Procedimiento de las pruebas de alcoholemia

La Ley de Seguridad Vial establece que, ante la sospecha de conducción bajo los efectos del alcohol, los agentes de tráfico deben realizar dos pruebas de alcoholemia con un intervalo mínimo de diez minutos entre ambas. Este procedimiento busca garantizar la fiabilidad de los resultados y ofrecer al conductor la oportunidad de contrastar las mediciones. Si no se respeta este protocolo, la sanción podría ser recurrible. Además, también existen otros supuestos y situaciones que podrían permitir a los sancionados recurrir la multa recibida.

Motivos para recurrir una multa por alcoholemia

Existen diversos fundamentos para impugnar una sanción por alcoholemia:

  • Errores en el procedimiento: Si los agentes no realizan la segunda prueba pasados los diez minutos reglamentarios, o si no informan al conductor de su derecho a una segunda medición, se podría cuestionar la validez de la sanción.
  • Falta de calibración del alcoholímetro: Los dispositivos deben estar debidamente calibrados y homologados. Una calibración incorrecta puede arrojar resultados erróneos, lo que constituye un motivo válido para recurrir. 
  • Ausencia de notificación adecuada: El conductor debe ser informado de los resultados de las pruebas y de las consecuencias legales derivadas. Una notificación deficiente puede ser motivo de recurso.

Pasos para recurrir una multa por alcoholemia

  1. Revisión de la notificación: Analizar detalladamente la multa para identificar posibles errores formales o procedimentales.
  2. Recopilación de pruebas: Obtener evidencias que respalden la impugnación, como testigos, fotografías del lugar o informes técnicos sobre el estado del alcoholímetro.
  3. Presentación de alegaciones: Elaborar un escrito de alegaciones dirigido al órgano sancionador, exponiendo los motivos y aportando las pruebas correspondientes.
  4. Asesoramiento Legal: Es recomendable contar con la asistencia de un abogado especializado en derecho de tráfico para aumentar las posibilidades de éxito en el recurso.

Plazos para recurrir una multa por alcoholemia

Es fundamental actuar con celeridad, ya que los plazos para presentar alegaciones suelen ser breves. Generalmente, se dispone de 20 días naturales desde la notificación de la sanción para interponer el recurso. No obstante, es aconsejable verificar los plazos específicos indicados en la notificación de la multa.

Recurrir una multa por alcoholemia no garantiza su anulación. Es esencial que existan fundamentos sólidos y evidencias claras de las irregularidades alegadas. Además, durante el proceso de recurso, la sanción puede quedar en suspenso, pero si finalmente se desestima, podrían generarse intereses de demora.

Aunque las multas por alcoholemia son sanciones severas destinadas a garantizar la seguridad vial, existen mecanismos legales para recurrirlas en caso de que se detecten irregularidades en el procedimiento. Es esencial conocer los derechos como conductor y actuar diligentemente, preferiblemente con el apoyo de profesionales especializados, para asegurar una defensa efectiva.