Después de 34 años y medio como integrante del Cuerpo de Bomberos de la Comunidad de Madrid, dice adiós la primera mujer que ha formado parte del mismo. Este domingo, Mara inicia su jubilación.
Lo avanzó ayer en redes sociales la cuenta oficial del 112 regional madrileño. Aunque la despedida de la pionera bombera no ha sido tan emotiva como la del conserje Chema, sí ha dejado también unas palabras de la propia protagonista.
En un vídeo compartido en la publicación, María Jesús Roa Alonso ha reconocido que ha sido "una experiencia muy buena". El haber estado "protegiendo a los madrileños", como han dicho sus compañeros, durante todo este tiempo.
"Me he sentido muy bien, rodeada siempre de padres, hermanos, primos, cuñados... He tenido de todo aquí y no me ha faltado de nada", ha apuntado ella, dibujando una sonrisa. Luego, ha asegurado que su labor le ha resultado "muy interesante".
"Estoy muy agradecida por haber podido entrar aquí, me voy feliz porque he hecho un montón de amigos", ha admitido. Además, cree que "es un trabajo que gusta", por el servicio que se presta a la ciudadanía. Mara se marcha "muy contenta".
Ahora empezará una nueva etapa en su vida, tras haber marcado "un hito especial" en el cuerpo autonómico de bomberos. Así lo ha calificado Fernando Bravo, jefe supervisor ya jubilado también, quien la conoció en su comienzo.
"Tuve la suerte de trabajar con ella cuando entró en este parque, era la número 500 y yo estaba de jefe de dotación", ha recordado. Ambos coincidieron durante diez años hasta que él se fue del parque: "Lo mejor que se puede decir es que ha sido una más de nosotros".
Por su parte, otro compañero llamado Carmelo le ha dado las gracias "por ser pionera de tantas cosas necesarias". "Orgullosos de ti, que sigas siendo feliz. Un abrazo", ha escrito en el mensaje dirigido a María Jesús.
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