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David Knezevich, el marido de Ana Knezevich, la mujer estadounidense de origen colombiano que desapareció el pasado 2 de febrero en el barrio de Salamanca de Madrid, ha sido detenido en el Aeropuerto Internacional de Miami, en Florida (EEUU), por su presunta relación con el caso, según ha informado este lunes la Policía Nacional.
La detención se enmarca en una investigación llevada a cabo por la Policía Nacional, colaborando en la misma la Agregaduría de Interior de Belgrado, el FBI de Florida, y la Policía de Colombia. Según ha podido saber Informativos Telecinco, el arresto se produjo el sábado y al detenido se le acusa de un delito de secuestro. La familia de Ana se mantiene a la espera de las novedades.
La publicación de la Policía Nacional:
Ana María Knezevich (apellido de casada) Henao, de 40 años, desapareció en un momento en el que comenzaba a rehacer su vida y organizaba planes de futuro. El 2 de febrero, por la mañana, fue a ver un piso -porque el contrato de la vivienda de la calle Francisco Silvela en la que estaba desde diciembre acababa en marzo-, pero no le convenció, según le explicó a su entorno, y después pensaba quedarse en casa para descansar, tal y como manifestó a una amiga sobre las 22:00 horas.
Todo parecía transcurrir con normalidad, pero el sábado 3 de febrero, dos amigas suyas recibieron dos extraños mensajes de WhatsApp desde su teléfono móvil que las inquietaron, así como a su familia, debido a que no parecían escritos por ella.
En aquellos mensajes (en inglés y en español) la mujer indicaba que se iba a ir con un hombre que acababa de conocer, cuando nunca se había ido con extraños. Además, los mensajes presentaban contradicciones y su teléfono móvil se apagó desde entonces. La preocupación por su paradero se disparó a partir de ese momento. Varias de sus amistades destacaron que, tiempo atrás, llegaron a pensar que el móvil y el correo electrónico de Ana podían estar hackeados.
La noche del viernes al sábado (del 2 al 3 de febrero), según los indicios, una persona con un casco de moto pintó con un spray negro las cámaras del bloque donde residía Ana. Además, según una vecina, había luz en su casa sobre las 01:00 horas de la madrugada y la persiana estaba sin bajar, cuando la mujer estadounidense siempre la bajaba.
El domingo 4 de febrero se comprobó que la vivienda estaba vacía, la luz estaba ya apagada, y el lunes 5 de febrero se declaró la desaparición oficial, cuando Ana no acudió a un viaje programado a Barcelona con una amiga. La mujer de 40 años, según su entorno, utilizaba la aplicación de citas Bumble, pero no estaba conociendo a nadie en particular en la actualidad.
David Knezevich, el marido de Ana, también con doble nacionalidad (estadounidense y serbia), aseguró en un primer momento que el día de la desaparición de su todavía esposa, el 2 de febrero, se encontraba en Belgrado, su ciudad natal, tal y como insistió su abogado, Ken Padowitz. Según el letrado, se instaló allí a finales de enero, pero no explicó el motivo. Sin embargo, Sanna Rameau, amiga íntima de Ana, explicó a Informativos Telecinco que David no le dijo eso cuando le preguntó. Según Sanna, el día de la desaparición le aseguró que se encontraba en Florida.
Llamaba la atención que David, que había tenido una relación matrimonial de 13 años con Ana, se mostrara distante con la familia. Decía que estaba colaborando con las autoridades, pero se negó a viajar a España para colaborar.
El matrimonio llevaba meses abordando el proceso de divorcio, que no terminaron por concluir, al parecer, por diferencias en el reparto de bienes y de patrimonio. La pareja había encabezado un negocio que tuvo gran éxito, EOX Technology Solutions, y disponían de varios inmuebles. Ana proponía en el acuerdo un 50%-50%, pero él proponía un 70%-30%, según la familia de la norteamericana.
Poco después se supo que David había contemplado vender las viviendas después de la desaparición de su esposa. Él rechazó todo tipo de acusaciones, pero ya estaba en el foco de los agentes. El caso quedó en manos del Juzgado de Instrucción Nº 51 de Madrid, pero el juzgado se inhibió en favor del Juzgado de Violencia sobre la Mujer Nº 9 de la capital debido a que se consideró que el principal sospechoso era el marido de Ana. De ahí trascendió que los agentes han barajado varios escenarios; que David alquilara un coche para viajar a España desde Serbia y no dejar rastro, que hubiera llegado en otro momento sin ser detectado y que hubiera contratado a una tercera persona.
Se barajó también que pudiera haber sido otra persona, del círculo de Ana en Madrid, pero el FBI y la Policía Nacional han determinado la presunta implicación de David en los hechos. Por ello, una vez se encontraba en EEUU, fuera de Serbia, fue detenido el pasado sábado en el Aeropuerto Internacional de Miami acusado de un presunto delito de secuestro. Ahora, los investigadores esperan que colabore. Tanto SOS Desaparecidos como el CNDES se mantienen atentos a las novedades.
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