El devastador paso de la borrasca Ciarán ha sembrado la tragedia en Madrid, donde continúa el luto y la consternación por la muerte de una joven de 23 años que falleció por la caída de un árbol cuando se encontraba cruzando por un paso de cebra junto a sus padres.
En la terrible escena, que requirió inmediatamente del servicio de apoyo psicológico para asistir a los progenitores, varias personas que también discurrían por el barrio de Almagro resultaron heridas.
Pese a los intentos desesperados por mover el tronco del árbol entre los gritos de los transeúntes que se encontraban en el lugar, cualquier ayuda fue imposible. El ejemplar, un olmo siberiano, superaba los 15 metros de altura y su tronco, de unos 50 centímetros, pesaba unas dos toneladas, según los servicios de Emergencias.
Tras la tragedia, entre los múltiples mensajes lamentando el fallecimiento de la veinteañera, la consternación y las condolencias, también han sido muchos los residentes madrileños que han denunciado la peligrosidad que representan muchos de los árboles de la ciudad, muchos de ellos con unas dimensiones tan elevadas que hacen temer una situación de riesgo cada vez que se adentre en la capital una borrasca tan virulenta como la de Ciarán, que ha dejado vientos por encima de los 80 kilómetros por hora en Madrid.
En el caso específico de este olmo, según informa El Mundo citando los datos de SERVER, “el servicio de inspección, evaluación y actuación en el arbolado de riesgo de Madrid”, –como indica el propio Ayuntamiento madrileño–, había sido sometido a dos revisiones en los dos últimos años por su tremendo porte.
La primera fue el 28 de mayo de 2022 y la última el 25 de mayo de este 2023, hace poco más de cinco meses. En ambas ocasiones los análisis hicieron constar que era, según refiere el citado medio, ‘un árbol sano’, sin ‘ningún defecto’. De hecho, indican que el propio Server constató ayer, tras el fatal accidente, que no sufría ninguna patología ni daño antes de ser derribado por la fuerza del viento dejado por Ciarán.
Según indica El Mundo haciendo referencia a un estudio del ‘Plan de Infraestructura’ del Ayuntamiento de Madrid, el barrio de Almagro, donde se contextualiza el fatal accidente que ha acabado con la vida de la joven de 23 años, cuenta con “las especies de arbolado con el porcentaje más alto de potenciales accidentes de la ciudad”. Concretamente, el 72% de los cerca de 3.000 ejemplares que hay en la zona recibieron esta clasificación.
El dato contrasta significativamente con el 33% de media de la capital, estando el distrito de Chamberí, –en el que se encuentra este barrio–, en un 54%. Además, en Almagro cerca de 500 árboles superan los 15 metros de altura, como era el caso del olmo siberiano que se cayó ayer con el paso de la borrasca, que además se trata de un ejemplar especialmente viejo.
Tras lo sucedido, el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, ha confirmado este viernes que el árbol no tenía "afecciones" y ha afirmado que se intensificarán los controles en los ejemplares de la capital.
Desde la Casa de Campo, en declaraciones a los periodistas, ha querido trasladar públicamente las condolencias del consistorio a la familia de la joven, al tiempo en que se ha pronunciado sobre el fatal accidente indicando que se habían producido las revisiones pertinentes y previstas sobre este árbol.
"Se hizo ayer una revisión también donde se ratificó lo que se había visto en mayo del 22 y el 23, es decir, que no había afecciones o que no había una causa aparente que justificara que el árbol se encontrara en una mala situación o en un mal estado. Se apunta que la situación en la que se encontraba el árbol, que es justo en el esquinazo, pudiera haber afectado para que se produjera el levantamiento o el desgarramiento de la raíz, porque por donde se desgarra es la raíz, no es que se caigan las ramas", ha explicado.
Ante lo sucedido, ha recalcado que se van a intensificar todas las acciones para tratar de tener controlados los árboles y, por tanto, de que en caso de que se pueda producir un accidente de estas características "poner todos los medios para volver a evitarlo".
"Esa es nuestra intención, tenemos ese contrato de conservación, de diagnóstico, de prevención que insisto, ha funcionado en relación a las inspecciones (...) pero desde luego tenemos que tomar las medidas para tratar de que esto no se vuelva a producir", ha dicho.
Más allá, el regidor ha considerado que también que se pueden mejorar los canales de información del Ayuntamiento por si hay que hacer más advertencias a los ciudadanos, aunque ha reconocido que no se puede en función de la situación meteorológica de ayer limitar la deambulación de los ciudadanos por la calle.
"Es un equilibrio que tenemos que encontrar. Mejorar en su caso los canales de información en relación con las zonas de riesgo que pueda haber; esto se ha hecho con los protocolos de cierre de los parques en determinadas circunstancias", ha apostillado.
En esta línea, y para finalizar, ha insistido en que se basan en criterios técnicos y que el árbol estaba "en un buen estado de conservación". "Yo sé que parece inexplicable, y más aún le debe parecer a los familiares de la persona fallecida, por tanto lo que tenemos que hacer es tratar de poner todos los medios para averiguar exactamente cómo es posible que ese árbol se cayera de cuajo arrancado por la raíz sin que las ramas y el tronco presentaran signos", ha subrayado Martínez-Almeida.