Cada 22 de diciembre se celebra en el Teatro Real de Madrid el sorteo de la Lotería de Navidad, por lo menos así es desde 2012, cuando este lugar se convirtió en sede del sorteo. Un día lleno de ilusión y esperanza, en el que cientos de personas esperan poder celebrar que son un poco más ricos, con la tranquilidad que eso conlleva.
No solo es necesario ganar, también hay que cobrar el premio y, si bien hay pocas posibilidades de que a un ganador de uno de los premios más grandes se le pase recoger su dinero, no sería la primera vez que desconocer si los premios caducan se convierte en un mal trago para los ganadores.
Sí, los premios de la Lotería de Navidad no son eternos, no tenemos el resto de nuestra vida para hacernos a la idea de que hemos ganado y acudir a cobrar el décimo. De hecho, tanto si el premio es grande como si es un reintegro, los ganadores solo tienen tres meses para convertir en dinero su décimo.
"El derecho al cobro de premios caduca a los tres meses, contados desde el día siguiente al del sorteo a que correspondan. Pasado este plazo, el importe de los premios no reclamados quedará a beneficio del Tesoro. Este plazo se ampliará en un día si el último del período fuera festivo en la localidad en que se tramite el pago".
Esto es lo que dice la norma y también lo que viene impreso en el reverso de los décimos, algo que puede que nunca hayamos tenido que plantearnos si nunca hemos ganado antes, pero que conviene saber, sobre todo para no dejar pasar el tiempo para poder cobrar sin esperar colas y sin aglomeraciones y quedarnos sin el dinero que tanta ilusión y ganas ha costado conseguir. Una vez pasado el plazo de tres meses, se pierde el dinero y ya no se puede obtener.
Si cobrar el premio es una prioridad para ti, puede hacerse desde el mismo día del sorteo, a partir de las 18:00 horas de la tarde.
No es igual ser beneficiario de un premio ‘pequeño’ o uno grande. Quienes han ganado un premio pequeño o inferior a 2.000 euros, pueden cobrarlo en la misma administración de loterías. Se puede recoger en metálico si este es menor de 1.000 euros y si es mayor, se puede obtener por Bizum. Estos premios están exentos de las retenciones de Hacienda.
Si el premio es superior a 2.000 euros, será necesario acudir a uno de los bancos autorizados para ello y se cobrará a través de un cheque o transferencia. Esto sirve tanto para los premios de poco más de esa cantidad, como para el premio gordo. El pago del premio es inmediato, sin comisiones ni recargos, pero para los premios mayores es necesario tener una cuenta bancaria abierta con anterioridad.
Cuanto antes se acuda a alguno de los bancos autorizados, más pronto se cobrará el premio.