Vladimir Putin atacó al fin. El presidente ruso, Vladímir Putin, ha lanzado un mensaje esta madrugada anunciando el comienzo de un ataque masivo de sus fuerzas armadas con Ucrania. Sus palabras han señalado que de conformidad con el Artículo 51 de la Carta de la ONU, con la aprobación del Consejo de la Federación –Cámara Alta rusa-, he decidido llevar a cabo una intervención militar especial. Según sus palabras, "lucharemos por la desmilitarización y la desnazificación de Ucrania. Nuestros planes no incluyen la ocupación de Ucrania. No obligamos a nada a nadie". Pero no parece que eso sea el caso. Los tanques rusos están penetrando en Ucrania desde Bielorrusia y Crimea. Parte del pueblo ruso no va a aceptar nunca, con Putin a la cabeza, que Ucrania sea independiente.
Volodímir Zelenski ha anunciado en rueda de prensa la ruptura de relaciones diplomáticas con Rusia, que las tropas ucranianas “están luchando encarnizadamente, el enemigo sufre graves pérdidas”, llama a los rusos a manifestarse con la guerra, señala que “Rusia ha atacado de la misma manera que la Alemania nazi lo hiso durante la Segunda Guerra Mundial”.
El Ministerio de Defensa de Ucrania dice que se ha logrado parar la ofensiva de las tropas rusas en la región de Chernihiv, se libran duros combates en las inmediaciones de Donetsk, Lugansk, Jersón y Járkov. El Ejército ucraniano recuperó el control de las ciudades de Mariúpol y Schastie “habiendo destruido al menos seis aviones, dos helicópteros y decenas de vehículos blindados”. Aleksei Arestovich, asesor del jefe de la Oficina de la Presidencia de Ucrania, confirmó la muerte hasta ahora de 40 soldados ucranianos. Informa la agencia de prensa ucraniana UNIAN.