La Organización Mundial de la Salud (OMS), ha informado de que la variante ómicron del coronavirus ya está presente en 57 países. Así lo ha confirmado en el informe epidemiológico semanal en el que ha alertado de que el avance de ómicron puede provocar muchas más hospitalizaciones.
“Incluso si la gravedad es igual o potencialmente menor que la de la variante delta, se espera que las hospitalizaciones aumenten si se infectan más personas y que haya un desfase entre el aumento de la incidencia de casos y el aumento de la incidencia de muertes”, dijo la organización en un comunicado.
Según la OMS, todavía son necesarios más datos para poder evaluar la gravedad de la enfermedad causada por la variante ómicron y si sus mutaciones afectarán a la respuesta inmunitaria generada por las vacunas.
Los países europeos empiezan a imponer ciertas medidas para frenar la expansión del coronavirus.
Francia pide distanciamiento social riguroso y limitar comidas y reuniones. Será un fin de año sin discotecas, cerradas desde este viernes y durante cuatro semanas, porque el virus circula entre los jóvenes, incluso vacunados. Además, vuelve la mascarilla obligatoria en las escuelas y los niños de entre cinco y once años recibirán la primera dosis de la vacuna.
En Italia, con el super pase verde, vigente hasta el 15 de enero, aparta a los no vacunados de lugares más concurridos, como bares, restaurantes, comercios o espacios culturales.
En Alemania, el ministro saliente de Sanidad se despide pidiendo restricciones más severas ya que plantea endurecer las medidas para los viajeros que entren en la Unión Europea. Una medida que ya aplica el Reino Unido: PCR negativa de máximo 48 horas, incluso a quienes tengan la pauta de vacunación completa, para quienes quieran entrar en el país.