Ya han pasado 38 días desde que comenzó la invasión de Ucrania. Los últimos movimientos apuntan a que las tropas rusas se están centrando en el este del país mientras continúa el repliegue en el norte. Esta noche, los ucranianos han recuperado una nueva localidad, Bucha, muy cerca de la capital Kiev, donde el panorama que ha quedado tras los combates es aterrador.
Bucha tiene 30.000 habitantes. Este sábado, en principio, está ya libre de rusos. Allí se ha librado durante cinco semanas una durísima batalla, y no queda una sola calle que no esté dañada por los bombardeos del Ejército ruso.
Las únicas personas que han resistido en Bucha son la gente mayor, que no tenía donde ir. La mayoría se ha refugiado en garajes o en las tiendas, rodeados del enemigo, durante estas agónicas cinco semanas.
Las Fuerzas Armadas de Ucrania han acusado este viernes a Rusia de haber minado edificios e infraestructuras civiles, así como otros espacios de la ciudad de Bucha, en la región de Kiev, antes de ser expulsados por las tropas ucranianas.
"Al salir de la ciudad de Bucha, las fuerzas de ocupación rusas minaron edificios civiles, infraestructura y otras áreas", han comunicado las Fuerzas Armadas en un último parte, en el que han alertado de que las tropas rusas se han replegado para intensificar los ataques en otras regiones, como Donetsk.
El Estado Mayor ha contado que en los territorios de Zaporiyia ocupados por las fuerzas rusas continúan las detenciones de ciudadanos "que organizan acciones a favor de Ucrania y preparan sabotajes contra los invasores".