El presidente saliente de Estados Unidos, Donald Trump, ha condenado la decisión de Twitter de suspender permanentemente su cuenta en la red social y amenaza con crear su propia plataforma para difundir sin filtros sus mensajes.
“¡No nos silenciarán!”, exclamó Trump en un comunicado distribuido por la Casa Blanca después de que la plataforma anunciara que le había privado definitivamente de su cuenta personal en la red social. “Predije que esto ocurriría. Hemos estado negociando con varios sitios más y tendremos un gran anuncio pronto, mientras miramos también las posibilidades de construir nuestra propia plataforma en un futuro cercano”, añadió.
El mandatario saliente dijo que Twitter “ha ido más y más lejos a la hora de prohibir la libertad de expresión” y acusó a la empresa de haberse “coordinado con los demócratas y la izquierda radical” para eliminar su cuenta: “Me han silenciado a mí y a ustedes, a los 75 millones de grandes patriotas que votaron por mí”.
El jefe de Estado también se quejó de las protecciones de las que disfrutan las redes sociales, que las eximen de consecuencias legales por lo que publican terceras partes en sus sitios web. La medida de Twitter priva al mandatario de su principal megáfono, una cuenta con la que ha emitido más de 55.000 mensajes durante más de 11 años y que contaba con 89 millones de seguidores.
La plataforma suspendió temporalmente el miércoles la mencionada cuenta durante 12 horas, después de que el presidente justificara en un tuit el asalto al Capitolio por parte de sus simpatizantes, que resultó en cinco muertos, al menos trece policías heridos y todo tipo de destrozos en la sede del Legislativo.
Twitter le devolvió después la cuenta con la advertencia de que “cualquier violación adicional de las reglas resultaría” en una suspensión permanente y este viernes, después de analizar sus dos últimos mensajes, decidió tomar esa extraordinaria medida. “Tras una revisión minuciosa de los tuits recientes de la cuenta @realDonaldTrump y el contexto que los rodea, hemos suspendido permanentemente la cuenta debido al riesgo de una mayor incitación a la violencia”, indicó la compañía en un comunicado publicado en su blog oficial.
La red social explicó que los tuits en los que defendía a sus votantes y anunciaba que no asistiría el 20 de enero a la investidura de Joe Biden se interpretaban como “una marcha atrás de su compromiso previo con una transición ordenada”. “Pueden servir como aliento a quienes puedan estar considerando actos violentos (al dejarles claro) que la investidura sería un objetivo ‘seguro’ porque él no asistirá”, añadió Twitter.
Esta es la medida más definitiva de las tecnológicas contra el discurso de Trump tras el asalto al Capitolio, aunque no la única. Tanto Facebook como Instagram bloquearon el acceso del presidente a su cuenta, al menos, hasta que se complete el traspaso de poder el 20 de enero, mientras que Twitch y Snapchat han desactivado su perfil indefinidamente.
Muchos seguidores del republicano difunden cada vez menos sus mensajes en Twitter y más en una red social alternativa de reciente creación llamada Parler. Sin embargo, dicha plataforma también ha empezado a sufrir consecuencias tras el ataque al Capitolio, ya que este viernes Google eliminó su aplicación de su tienda virtual.