Dos trabajadores de saneamiento de 'Pelican Waste & Debris', una empresa de gestión de residuos en Louisiana, Estados Unidos, se han convertido en unos auténticos héroes al encontrar a una niña de solo 10 años que había sido secuestrada.
Los hechos sucedieron durante el fin de semana, cuando la pequeña fue secuestrada el domingo por la tarde en la casa de un familiar en Nueva Iberia, a unos 20 millas de Lafayette. En ese momento saltaron todas las alarmas, y la policía emitió una alerta pidiendo la colaboración ciudadana para encontrar al presunto secuestrador, identificado como Michael Sereal. Además, aportaron un dato clave: el vehículo del hombre, que conducía un Nissan Altima plateado.
La mañana del lunes, los trabajadores Dion Merrick y Brandon Antoine, comenzaron su ruta por la mañana. De pronto, se dieron cuenta de que en mitad de un campo al lado de la parroquia de San Martín se encontraba el vehículo del que la policía había emitido la alerta, como recoge NBCNews.
Sus sospechas se confirmaron al ver y reconocer en el interior del coche al sospechoso del secuestro de la menor. Inmediatamente se dieron cuenta de la gravedad del asunto y llamaron a las autoridades, colocando su coche para bloquear la entrada del campo y que el acusado no pudiera escapar.
En menos de un minuto la policía llegó al lugar y procedieron a la detención de Sereal, que ha sido acusado de un secuestro agravado. El acusado se encuentra en la base de datos de delincuentes sexuales de Nueva Iberia, condenado ya por un abuso sexual a un menor.
Desde entonces ha sido trasladado a Nueva Iberia y acusado de secuestro agravado y no registrarse como delincuente sexual, según los registros de la cárcel. Está incluido en la base de datos de delincuentes sexuales de New Iberia por una condena por conocimiento carnal de un menor.
La empresa de residuos no ha dudado en destacar la valiente respuesta social de sus trabajadores: "En Pelican Waste nos esforzamos por lograr un ambiente familiar y tratamos de transmitirlo a nuestros trabajadores. Estamos muy orgullosos de los esfuerzos genuinos de estos valiosos empleados ahora y siempre", aseguró un portavoz de la compañía.
Gracias a la rápida actuación de estos ciudadanos, la pequeña pudo volver a casa con su familia después de esta trágica experiencia, y el culpable espera su condena.