Cuando parece que las crueldades que estamos viendo en Ucrania no pueden ir a más, seguimos encontrando más muestras de esos crímenes de guerra en Bucha. Unas imágenes que desmontan por completo la teoría conspiranoica de Moscú.
En el jardín de una casa aparecen los cadáveres de toda una familia. Entre ellos, el de una mujer y dos hombres con señales de haber sido ejecutados. Otra matanza atroz que debe ser investigada.
Los soldados rusos los ocultaron bajo tierra para esconder su rastro, pero los vecinos lo vieron. "Los cogieron a los tres, los torturaron y los asesinaron", narra un testigo. Son los cuerpos de la alcaldesa del pueblo de Motyzhyn, su marido y su hijo de 25 años, todos ellos maniatados y con signos de tortura.
A pocos metros de allí aparecía un nuevo cadáver. Otro aparente episodio de la crueldad extrema de los soldados rusos que sale a la luz tras su retirada. Y que tras la masacre de Bucha, como teme el mandatario ucraniano, Volodímir Zelenski, "puede que haya muchos más". Zelenski, durante su discurso ante el Consejo de Seguridad de la ONU, ha comparado a Rusia con el ISIS.
El presidente ucraniano contemplaba el desolador paisaje tras el paso de los tanques rusos por Irpín, en la región de Kiev. Un terreno arrasado por la artillería rusa que todavía impacta más visto desde el aire.
Ucrania ha abierto sus puertas para que la Corte Penal Internacional investigue a Rusia por crímenes de guerra. Sin embargo, la posibilidad de juzgar a Vladimir Putin o a sus militares es remota ya que su país ni reconoce ni colabora con este tribunal desde que lo abandonó hace 6 años.