El ejército ruso ha bombardeado la mítica torre de televisión de Kiev, de 385 metros de altura, encargada de distribuir señales principales de radio y televisión. Moscú ha dirigido un ataque contra la infraestructura, que se ha visto humear desde prácticamente toda la ciudad.
El ataque ha provocado la muerte de cinco civiles y dejando a otras cinco personas heridas, según informó el Servicio Estatal de Emergencias ucraniano en su página de Facebook.
El asesor del ministro del Interior de Ucrania, Anton Gerashchenko, ha publicado un mensaje en su canal de Telegram en el que adjunta un vídeo y una foto en los que se aprecia una columna de humo en el lugar donde se alza la torre. "Los nazis de Vladimir Putin acaban de atacar la torre de televisión de Kiev. Odio", ha añadido Gerashchenko.
Como resultado de este presunto ataque ruso, se han registrado problemas puntuales en la transmisión de televisión, según apunta la agencia ucraniana UNIAN.
Las autoridades de Ucrania han denunciado a primera hora de este mismo martes un ataque aéreo contra un edificio administrativo situado en la principal plaza de Járkov, la segunda ciudad más poblada del país.
Más tarde, el Ministerio de Defensa de Rusia ha alertado de que se está preparando una serie de ataques de "alta precisión" contra instalaciones de la Inteligencia ucraniana en Kiev.
Rusia había avisado en las últimas horas de que dirigiría ataques con armas de alta precisión contra las torres de telecomunicaciones en el centro de Kiev, según la justificación de Moscú, para "suprimir los ataques informativos contra las instituciones y los ciudadanos rusos". El ministerio de Defensa ruso incluso advirtió a los ciudadanos ucranianos que residieran cerca de estas torres que "evacuaran sus casas por su propia seguridad".