El presidente de Rusia, Vladímir Putin, no esconde sus ansias imperiales. Tras evidenciarse sus intenciones militares en todo el territorio ucraniano, Maria Zajarova, portavoz del Ministerio de Exteriores del Kremlin, ha amenazado con "posibles consecuencias militares y políticas" a Finlandia y Suecia si deciden entrar en la OTAN. Y es que la Alianza Atlántica ha lanzado el amago de invitación a estos dos países a que abandonen su neutralidad y se unan a la organización.
Putin, antes de la primera ofensiva rusa en Ucrania este jueves, exigió a la OTAN que Ucrania no formase parte de la organización. Se trataba de la exigencia principal del Kremlin para evitar la invasión en el país vecino por parte de su Ejército. Por ahora no pertenece, pero el presidente ruso ya ha actuado.
Maria Zajarova ha señalado este viernes respecto a Finlandia y Suecia: "Es evidente que la adhesión de Finlandia y Suecia a la OTAN, que es principalmente un bloque militar, tendría graves consecuencias militares y políticas que requerirían que nuestro país tome medidas recíprocas".
"Todos los Estados participantes de la OSCE a título nacional reafirmaron en su día, incluidos Suecia y Finlandia, el principio de que la seguridad de algunos Estados no debe construirse a expensas de la seguridad de otros países", precisó.
La disolución de la URSS se produjo en 1991. Desde entonces se han incorporado a la OTAN tres repúblicas bálticas -Estonia, Letonia y Lituania- en el año 2004. Ademas, junto a estos, se unieron otros países de Europa del Este, como Polonia.
Por su parte, Ucrania no forma parte de la OTAN, pero es considerado un aliado estratégico, especialmente por su proximidad a Rusia. El Kremlin ve en la OTAN una organización que defiende los intereses de Estados Unidos en la región.
La adhesión de Ucrania a la OTAN supondría limitar al mínimo la soberanía e influencia de Rusia sobre el país. Un territorio que consideran indispensable por motivos históricos, sociales, culturales y políticos. "Ucrania es parte inalienable de nuestra propia historia", comentó Vladímir Putin al respecto.
Las amenazas de invasión en Finlandia y Suecia por su presunta adhesión a la OTAN se producen después de que el secretario general de la Alianza Atlántica, Jens Stoltenberg, invitase tanto a Suecia como a Finlandia a la última cumbre mantenida (anoche), pese a que ninguno de ellos forma parte de la organización.
Sanna Marin, primera ministra de Finlandia, señaló en enero que la adhesión del país a la OTAN no es una prioridad, pero que si es necesario estarán preparados para solicitar su ingreso en la organización militar.
"En los últimos años, hemos estrechado mucho nuestra relación con la OTAN. No estamos discutiendo esa posibilidad ahora mismo, pero mantenemos la opción de hacerlo en el futuro", comentó la dirigente. Por su parte, Magdalena Andersson, primera ministra de Suecia, comentó la condición del país como aliado: "Nos preparamos para una situación que puede ser duradera", sentenció.