Rudy Giuliani, el abogado personal de Donald Trump insiste en su teoría del "fraude masivo" para sacarlo de la Casa Blanca. En una rueda de prensa, el letrado al que el tinte le ha jugado una mala pasada, ha defendido -a la manera de Trump- un complot contra el presidente, además de avisar que impugnará las elecciones. Todo esto a gritos y mientras le corría el sudor y el tinte por la cara.
"Lo que les estoy describiendo es un fraude masivo", ha asegurado Giuliani en la rueda de prensa celebrada en el Capitolio, junto al resto del equipo legal de Trump, que no han escatimado en acusaciones sobre intervenciones comunistas extranjeros y antifascistas.
El abogado de Trump, desde la Casa Blanca ha defendido una de sus teoría de que existe un "patrón" a nivel nacional que sugiere que había un plan, desde un lugar centralizado para ejecutar estos diversos actos de fraude", especialmente enfocado "en las grandes ciudades controladas por los demócratas", de las que ha dicho que "tienen una larga historia de corrupción".
"Conozco los crímenes, puedo olerlos. No tienes que oler este, puedo probártelo de 18 maneras diferentes. Puedo probarte que ganó Pensilvania por 300.000 votos. Puedo probar que ganó Michigan, probablemente por 50.000 votos", ha dicho Giuliani en el mismo tono exaltado en el que habla Trump en público.
En la frenética comparecencia en la que el sudor se le mezclaba con el tinte capilar, Rudy Giuliani siguió el guión de Trump y señaló a ciudades con importantes núcleos de población afroamericana, como Detroit, Atlanta, o Filadelfia, como los principales centros en los que se habría gestado este supuesto fraude contra su cliente.
"La única sorpresa que habría encontrado en esto es que Filadelfia no había hecho trampa en estas elecciones, porque durante los últimos 60 años han hecho trampa en casi todas ellas y se podría decir lo mismo sobre Detroit", ha sostenido el abogado y exalcalde de Nueva York.
Giuliani ha insistido en su idea de emprender acciones legales para impugnar los resultados en estados como Georgia, que horas después confirmó la victoria de Joe Biden tras la auditoría realizada, Arizona, e incluso Nuevo México y Virginia, y ha prometido estar en posesión de "cientos" de declaraciones juradas que avalarían estas acusaciones, pero que no pueden darlas a conocer de momento.
En la rueda de prensa también otro de los miembros del equipo legal de Trump; La asesora legal de la campaña del presidente de Estados Unidos, Jenna Ellis, ha criticado la "impaciencia" de los medios y ha explicado que las pruebas se presentarán ante los tribunales.
"Este no es un episodio de 'Ley y orden', donde todo se resuelve en 60 minutos", ha respondido aludiendo a a la popular serie de televisión. Otro de los abogados de Trump, Sidney Powell, también siguió su intervención insistiendo en la línea conspirativa, en la que "dictadores" y "corporaciones" estarían detrás de este complot. "Todos están en contra nuestra", ha clamado, por lo que se sorprende de que los medios de comunicación no estén "asombrados".