El rey de Tailandia, Rama X, ha concedido el indulto a su concubina real Sineenat Wongvajirapakdi, a la que retiró en octubre del año pasado los títulos y rangos militares por haber sido "desleal y desobediente a la Corona". Desde entonces, poco se ha sabido de ella, salvo que había sido encarcelada, e incluso se había rumoreado que había muerto en la prisión. Sin embargo, ahora ha sido perdonada y devuelta al harén del monarca.
El pasado viernes, esta enfermera de profesión nacida en 1985 abandonaba el penal en el que estaba recluida y era inmediatamente conducida a un avión que la transportaba a Alemania. Allí se encuentra el Grand Hotel Sonnenbichl de Baviera en el que Rama X tiene su harén personal: un conjunto de 20 concubinas que, según la investigación del periodista especializado en el país asiático Andrew MacGregor Marshall, serían drogadas para ser ofrendas de placer de la corona.
Sineenat llegaba el sábado, a bordo de un Boeing 747, a Múnich, en cuyo aeropuerto recibió multitud de parabienes y un tratamiento real, desde sombrillas ceremoniales a la propia presencia de Rama X, que vestía uno de sus ya típicos tops femeninos.
La concubina indultada se trata de la mayor "rival" de Suthida Vajiralongkorn na Ayutthaya, la cuarta esposa de Rama X, con quien contrajo matrimonio en mayo del año pasado. Aun así, en agosto, el día de su 67º cumpleaños, el monarca se autorregalaba una "consorte imperial". Esa era Sineenat, la primera en casi un siglo en recibir dicho título. Ella estaba graduada en la Real Escuela de Enfermería, luego entrenada como piloto y, por último, parte de la Guardia Real.
Fue entonces cuando el soberano puso sus ojos en ella y la convirtió en su concubina favorita, llegando a televisar la ceremonia, en la que por cierto estaba presente Suthida. Sin embargo, en octubre ya estaba encarcelada. Las razones son variadas, pero sobre todo se le atribuye el delito de deslealtad, una de las conductas más inaceptables dentro del código de moral tailandés. El comunicado oficial del Palacio era tajante y tachaba a la amante de inadecuada para su puesto.
Según dicho comunicado, Sineenat era una mujer "ambiciosa" que "trató de elevarse al estatus de la reina" dado que "no entendía las costumbres y tradiciones en la corte tailandesa". Añadía que "su comportamiento fue considerado irrespetuoso" porque "hubo desobediencia al rey y la reina". "Sineenat también emitió órdenes usando el nombre del rey sin su permiso, lo cual causó confusión entre el público en general", dictaba el texto que significó la expulsión de la concubina tanto del Gran Palacio Real de Bangkok (la residencia oficial) como del Palacio Chitralada, la residencia privada.
Pese a que Sineenat ha vuelto a su vida, Rama X fue el pasado lunes a ver a su esposa a un hotel de la ciudad suiza de Engelberg, donde Suthida ha establecido su residencia. Todo ello, claro, mientras que cada vez más grupos de jóvenes tailandeses reclaman una reforma democrática que les proteja contra los caprichos despóticos y el despilfarro constante del rey.